"Las nuevas tecnologías conciliarán trabajo y familia"
María Jesús Prieto ha vivido las vertiginosas transformaciones de la tecnología de la comunicación en 30 años de vida profesional. Ingeniera en Telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Madrid, se ha mantenido ligada a grandes proyectos que han conducido al relevo de la telefonía analógica por la tecnología digital en España. Prieto acaba de ser elegida presidenta del Instituto de Ingeniería, que reúne a 63.000 profesionales de todas las ramas -minas, caminos, industria, aeronaútica, naval-, incluida defensa. Un colectivo mayoritariamente masculino."Que una mujer presida un gremio como éste es inusual, no sólo en España. Lo sería también en Estados Unidos y en el resto de Europa, pues, lamentablemente, muy pocas mujeres optan por las carreras técnicas. En las escuelas superiores de las universidades de los países desarrollados las mujeres representan un 25% del total de estudiantes", dice.
Prieto ha trajinado en una rama de la técnica que empieza a producir grandes cambios en la vida cotidiana, en la manera de hacer negocios, y a modificar las tradicionales ideas sobre el empleo. "Las mujeres llegarán a la ingeniería de la mano de las nuevas tecnologías", vaticina.
"Las telecomunicaciones han permitido que la actividad laboral se independice del sitio de trabajo. Algunas grandes empresas de software de Estados Unidos contratan personas que se encuentran físicamente en la India o en Canadá. Y todo el trabajo se hace en tiempo real. Una empresa no tiene necesidad de tener a sus empleados metidos en una habitación, ahora puede mantenerlos en sus lugares de origen. Ya no es necesario que se desplacen". Según Prieto, mujeres y hombres podrán diseñar sus proyectos de ingeniería en casa. "Sin duda, aumentarán las oportunidades de empleo para las mujeres, pues podrán conciliar su trabajo con la vida familiar".
Prieto dirige hoy la Fundación Madritel, que se encarga de concebir nuevas estrategias para la empresa. Tras muchos años de carrera en la estatal Telefónica, participó en el proceso de privatización de las comunicaciones en España. Durante dos años, hasta 1998, cumplió las funciones de directora general del Instituto de Meteorología, un cargo que nombra el Gobierno.
Según Prieto, ni los puestos de dirección de las empresas ni los de responsabilidad pública son de fácil acceso para las mujeres. "Cuando se va a designar a alguien en el consejo de administración de una empresa se piensa en una persona de confianza, y el amigo de un señor suele ser, normalmente, otro señor", dice.
La profesión y la actividad gremial, sumadas al hecho de que es madre de cuatro hijos, le han exigido desarrollar una "voluntad férrea", y llevar el control de cada segundo, "hasta el punto de haberme convertido en una persona impaciente", admite. El tiempo que dedico a un asunto depende del resultado que voy a obtener". Cuando suena un móvil, amablemente, Prieto da por concluida la entrevista: "Perdone, pero tengo una llamada en espera".
