Putin anuncia a la delegación de la Unión Europea una solución política en Chechenia

Vladímir Putin dio ayer una nueva muestra de cómo gobernará Rusia. Se equivocaron de plano quienes esperaban que, tras el puñetazo del Consejo de Europa -cuya asamblea parlamentaria inició el jueves el procedimiento de expulsión por las atrocidades en Chechenia-, el presidente electo rezumaría la furia que debe de consumirle. Al contrario, y aunque Javier Solana dijo que "habló con el corazón", mostró en Moscú al responsable de política exterior de la UE y al ministro portugués de Exteriores, Jaime Gama, su decisión de trabajar hacia la integración en Europa.

"Continuaremos explicando nuestra posición con paciencia", aseguró Putin tras hacer notar que, "de hecho", Rusia defiende en el Cáucaso "los intereses de toda Europa", y que el golpe bajo de Estrasburgo se debe a falta de información. Mucho más duro se mostró su asesor para Chechenia, Serguéi Yastrzhembski, que acusó a Occidente de estar preso del "síndrome de Chechenia" y aseguró que el Consejo de Europa puede olvidarse de enviar allí observadores. El ministro de Exteriores, Ígor Ivanov, acusó a la Asamblea Parlamentaria de actuar según caducos esquemas de la guerra fría y de fiarse sólo de lo que dicen los terroristas. El presidente de la Duma, Guennadi Selezniov, habló de "error fatal", y el del Consejo de la Federación, Yégor Stróyev, de "decisión corta de miras". Con casi toda la clase política indignada por el agravio, Putin tenía en sus manos calentar o desactivar la crisis. Borís Yeltsin habría optado probablemente por caldear los ánimos con una buena dosis de demagogia. Putin prefirió enfriarlos. Solana y Gama apreciaron el gesto.

Según el jefe de la diplomacia portuguesa, Putin les anunció que prepara "una plataforma política para Chechenia que presentará la próxima semana". En un aparte con los periodistas españoles, Solana aclaró: "Yo creo que estará más bien en la línea de convocatorias electorales".

Fuentes del Kremlin citadas por la agencia Interfax aseguraron luego que no se discutió ningún plan de solución política. Antes de la cita, el viceprimer ministro para Chechenia, Nikolái Koshman, había anunciado que Putin renunciaba a establecer en Chechenia una administración presidencial directa.

Yastrzhembski, por su parte, señaló que en cuestión de semanas se presentará a la Duma un proyecto de ley sobre la "estructura política de Chechenia para el periodo transitorio". ¿Se refería a eso Putin al hablar de "plataforma política"?

Solana y Gama viajaron a Moscú, en palabras del primero de ellos, para transmitir dos mensajes a Putin: "Que la UE quiere una relación sólida y profunda con Rusia y que desea hablar con franqueza de las divergencias, incluida Chechenia". Se cumplió el objetivo. No se han cortado los puentes, se ha establecido una relación personal y se seguirá discutiendo el lunes en Luxemburgo (en el Consejo de Cooperación) y a finales de mayo en Moscú (en la cumbre UE-Rusia). Solana hizo notar que se mantienen dos peticiones clave: una comisión "creíble" que investigue las atrocidades en Chechenia y acceso a la zona de conflicto de las organizaciones internacionales. Esto último se lo garantizó Putin, afirmó, como prueban las próximas visitas a la zona de conflicto de una delegación de la OSCE y de embajadores de países comunitarios acreditados en Moscú.

[EEUU reiteró ayer que Rusia debe alcanzar una solución política en Chechenia o aumentará su aislamiento internacional, según James Rubin, portavoz del Departamento de Estado, informa Efe].