HASTA AQUÍ PODÍAMOS LLEGAR
En Brasil se toman muy en serio el cumplimiento de los horarios en el transporte público. Tanto es así que los indignados usuarios de una línea de cercanías de São Paulo decidieron prenderle fuego al tren después de esperar durante horas su salida. Los pasajeros no sólo esperaron largo tiempo en la estación a que llegara su convoy, sino que, además, una vez se habían subido, tuvieron que aguardar sentados varias horas más. Tan intolerable retraso tuvo su castigo: los viajeros se bajaron de los vagones y les prendieron fuego. Un agente de policía declaró que era prácticamente imposible descubrir a los culpables instigadores de la salvajada, que destruyó por completo un tren que cuesta más de 200 millones de pesetas (1,2 millones de euros).-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.