El Gobierno navarro quiere que la Policía Foral tenga una unidad de policía judicial

El Gobierno navarro remitirá próximamente al Parlamento foral un proyecto de ley de reorganización interna de la policía autonómica que pretende, entre otros objetivos, la creación en el seno del cuerpo de una unidad de policía judicial. El presidente de Navarra, Miguel Sanz, de UPN, hizo el anuncio el pasado domingo durante los actos oficiales de la festividad anual del cuerpo, que, con la toma de posesión de los 46 integrantes de la decimoprimera promoción, alcanza ya los 541 agentes. El PNV ya ha criticado el proyecto.

Los actos se desarrollaron con absoluta normalidad, pese a que el Sindicato de Policía Foral (SPF), mayoritario en el cuerpo, había pedido a las autoriddes que no acudieran a los festejos si pensaban realizar "una exclusiva campaña de imagen". Sanz se encargó de tranquilizar la situación al anunciar la reorganización interna del cuerpo para incrementar sus competencias de trabajo, si bien la principal demanda, tanto de los propios agentes como de los partidos navarros, la asunción en exclusiva de las competencias de tráfico, ahora compartidas con la Guardia Civil, sigue pendiente por la oposición del Ejecutivo central a cederlas."Éste es un momento para recalcar el firme compromiso del Gobierno navarro en el desarrollo de la Policía Foral", aseguró el jefe del Ejecutivo autónomo, "a fin de que asuma progresivamente la totalidad de las funciones que son características e inherentes a un cuerpo de policía dentro de un modelo de seguridad pública sin exclusiones". En ese modelo, siguió Sanz, todos los cuerpos de policía existentes en los niveles local, foral o estatal, deben coordinar sus actuaciones para "alcanzar los objetivos de calidad y de eficiencia policial".

Plantilla

La plantilla de la Policía Foral está actualmente compuesta por un jefe, seis oficiales, 53 sargentos, 70 cabos y 411 agentes, que se encargan de tráfico, protección ecológica, protección de edificios y autoridades, juegos y espectáculos y un gabinete técnico de investigación y denuncias.

El Plan Director del cuerpo, aprobado por el Gobierno hace ya años, prevé un fuerte desarrollo en sus funciones policiales, centrado en la asunción exclusiva de las tareas de control de tráfico en toda Navarra.

El vicepresidente del Ejecutivo foral, Rafael Gurrea, señaló recientemente que el Ministerio del Interior no tiene ninguna intención de ceder esa función a la comunidad autónoma, si bien las palabras de Gurrea fueron luego matizadas por responsables de Interior y del Ejecutivo foral, así como por dirigentes del PP y de UPN, que han prometido que ese trasvase de competencias se hará realidad en esta legislatura.

La propuesta de Sanz levantó ayer mismo las primeras críticas provenientes de las filas nacionalistas. El presidente del PNV en Navarra, José Antonio Urbiola, acusó al Ejecutivo autónomo de seguir con la Policía Foral una política "sucedánea", informa Efe. Urbiola agregó en un comunicado que, mientras UPN habla de la nueva unidad de policía judicial y de la asunción de las competencias de tráfico, "en el fondo no quiere una policía integral y, lo que es más grave, no quiere decir que no la quiere". El dirigente peneuvista se preguntó además si una Policía Foral integral supondría "el repliegue" de las Fuerzas de Seguridad del Estado destinadas en Navarra.