Las madrileñas presentaron 676 denuncias más por maltrato de sus parejas que en 1998

Cada día, una media de nueve madrileñas presentan denuncia por maltrato contra sus maridos o compañeros. El año pasado, según datos del Ministerio del Interior recogidos por la Comunidad, fueron 3.907 las denuncias interpuestas por violencia conyugal (676 más que en 1998). La directora general de la Mujer, Asunción Miura, considera que este incremento del 17% se debe a la mayor sensibilización sobre el asunto. La Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas cree, sin embargo que sí han aumentado los malos tratos. Cuatro mujeres murieron en la región a manos de sus parejas.

Hasta 1997, el número de mujeres que denunciaban malos tratos de sus maridos y compañeros se mantenía en torno a 3.000 al año. A partir de entonces se produjo un incremento. "No es que haya aumentado la violencia conyugal, es que las campañas de concienciación están dando sus frutos. Es a todas luces imposible que con la mayor sensibilización que existe aumenten las agresiones", asegura Miura. La directora de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, Ana María Pérez del Campo, considera, sin embargo, que los malos tratos sí han aumentado. "Es verdad que las mujeres han interiorizado sus derechos y ya no muestran sumisión, pero esa misma rebeldía provoca una mayor agresividad por parte del maltratador. A nosotras nos llegan de 15 a 20 casos diarios", añade. "Últimamente hay mujeres que se quejan de que en algunas comisarías de distrito les disuaden de presentar denuncias, por lo que estamos derivándolas a los servicios policiales especializados", concluye.

La dirección general ha emprendido un programa de sensibilización dirigido a alumnos de 15 a 18 años de centros escolares de la Comunidad, ya que, según recalca Miura, "la prevención es imprecindible para erradicar el maltrato". Su objetivo es promover la educación igualitaria y el respeto. "Nos preocupa que a menudo los chicos adoptan una actitud a la defensiva sobre estos problemas", matiza Miura.

El Gobierno regional dispone en la actualidad de tres centros de emergencia para mujeres maltratadas con 39 plazas y espera abrir este año cuatro más en diversos municipios. Dos ellos debían haber estado ya listos en enero. Aquellas mujeres que, tras su paso por el centro de emergencia, donde permanecen durante un mes, no tienen dónde guarecerse mientras superan las secuelas físicas y psíquicas de las agresiones pasan a la casa refugio, donde permanecen durante seis meses. La Comunidad dispone de dos casas refugio, una propia, con 54 plazas, y otra concertada, con 70. Por ahora, según Miura, "no hacen falta más".

El último peldaño en la atención a maltratadas está en los pisos tutelados. Por ahora hay cinco y se espera abrir otros siete a lo largo de 2000. Para aquellas mujeres que precisan atención psicológica o grupos de autoayuda, pero que tienen donde vivir sin sufrir riesgos, existe un centro de día. Entre los proyectos está crear más centros de día en grandes municipios de la región.

En 1999 fueron 211 las mujeres con niños que pasaron por las casas refugio; 42 las que vivieron en los pisos tutelados, y 243 las atendidas por el centro de día. La tercera parte de estas mujeres eran inmigrantes. "La violencia doméstica que sufren algunas inmigrantes es todavía más primitiva que la que padecen las españolas. Es aquello de la maté porque era mía...", concluye la directora regional de la Mujer.