Arzalluz advierte de que en España "no van a ir bien las cosas" si no funcionan bien en el País Vasco

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, eligió ayer los jardines del Palacio Miramar de San Sebastián para arremeter contra el PP, el ministro de Interior en funciones, Jaime Mayor, y dar un tirón de orejas a los empresarios vascos que han criticado recientemente la faltade liderazgo en Euskadi. Minusvaloró la victoria del PP en las pasadas elecciones y restó importancia a que los populares hayan logrado el mismo número de parlamentarios en el País Vasco -siete- que el PNV. "Eso es como el trasvase Tajo-Segura, un juego españolista", indicó, y pidió a los diputados del PNV que no se "achanten" en Madrid, porque "eso [la mayoría absoluta del PP] es un ogro de papel, y si no el tiempo".No hubo medias tintas en su discurso y por ello advirtió al PP de que, por mucho que quiera arrinconar a los nacionalistas vascos, no lo van a conseguir. "En España no van a ir bien las cosas si aquí no van bien", aseveró. Dijo que el PNV es quien ha traído la prosperidad a Euskadi e instó a los empresarios vascos que han criticado a los peneuvistas esta semana a que pregunten a José María Aznar si va a hacer la misma política en materia de pacificación que en la anterior legislatura, en la que "no movió un dedo". Una crítica muy repetida por Arzalluz desde que el pasado 3 de diciembre ETA rompió la tregua.

En este sentido, presidente del PNV censuró de nuevo la falta ede acompañamiento del Gobierno de Aznar a sus esfuerzos durante la tregua de ETA. "Nos dejaron solos a los que estábamos intentando buscar una solución, no movieron un dedo, más aún, utilizaron toda clase de artimañas para evitar que eso fuera una vía de negociación".

El dirigente nacionalista aseguró que en su partido no tienen miedo a la mayoría absoluta del PP y que no acepta la "arrogancia" de los dirigentes de esa formación política. "El PNV", dijo, "juega a largo y tiene una tarea enormemente interesante que cumplir en Madrid, que pasa por completar el Estatuto e impulsar una política de pacificación". Respecto a los resultados electorales, dijo que "no ha ganado el PP, sino que se ha hundido la izquierda". Así, la "tragedia es que el PP ha subido medio millón de votos y la izquierda ha bajado tres millones".

El líder del PNV utilizó un tono sarcástico al pedir a Mayor Oreja que "siga haciendo la misma política", porque, según reiteró, "uno de los que más votos nos ha dado aquí ha sido él". Advirtió de que "la política de Mayor de sublevar a la gente con la violencia ha sublevado al vasco". Y restó importancia a las acusaciones de desestabilización y división de la sociedad porque, según dijo, "el PNV está gobernando Euskadi y lo está haciendo bien".

En el mismo acto, el diputado Iñaki Anasagasti anunció que la próxima semana el PNV se reunirá en Barcelona con los nacionalistas de Convergència y Unió y Bloque Nacionalista Galego para "diseñar una estrategia de coordinación de esfuerzos en Madrid". El grupo nacionalista vasco en el Congreso trabajará, según Anasagasti, por los derechos humanos, la solidaridad, el autogobierno y la paz. Entre las iniciativas que van a plantear está la de mejorar la moción sobre flexibilización de la política penitenciaria que se aprobó hace más de un año. El grupo va a trabajar en favor de la constitución de un Tribunal Penal Internacional y para que no se modifique la Ley de Extranjería.