Francia y la OIT tratan de defender el empleo ante la globalización
El Gobierno francés y la Organización Internacional de Trabajo (OIT) se comprometieron ayer a elaborar un ambicioso plan de propuestas que permitan preservar la seguridad del trabajo frente a las mutaciones y los avatares del proceso de mundialización. Además del estudio del fenómeno, de los efectos que la globalización acarrea en el mercado laboral, el Ejecutivo de París y la OIT ponen el acento en la búsqueda de alternativas coordinadas internacionalmente, de forma que pueda llegarse antes de fin de año a una conferencia sobre el plano social, equivalente a lo que Davos supone en el terreno financiero."Hemos llegado a ser muy buenos en lo que se refiere al análisis y al diagnóstico, pero muchísimo menos a la hora de establecer propuestas", subrayó ayer la ministra de Empleo y Solidaridad, Martine Aubry. "Tenemos que llegar a propuestas de orientación que nos permitan luchar contra la agravación de las desigualdades y la dictadura de la búsqueda de la rentabilidad financiera a breve plazo porque eso", dijo la ministra, "destruye la economía y condiciona el futuro". El encuentro contó con la participación de expertos e intelectuales reconocidos como Alain Touraine, Jean-Paul Fitoussi, Alain Supiot o Tiziano Treu.
El presidente de la OIT, el chileno Juan Somavia, indicó que, visto el panorama mundial, su organización deposita la mayor parte de sus esperanzas en la eventual respuesta de Unión Europea. "Si Europa conserva sus valores sociales en este proceso de adaptación a la economía mundializada, el ejemplo supondrá un impacto enorme en todas partes", enfatizó.
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