Un funcionario de la ONU, herido de bala en el interior de Serbia

Una persona, perteneciente a Naciones Unidas, fue herida de bala ayer en la zona de Presevo, en el sur de Serbia limítrofe con Kosovo, según informó la portavoz de la Misión de la ONU en Kosovo (Unmik), Susan Manuel. La portavoz señaló que el herido, Marcel Drogan, es empleado de la oficina de la ONU para la ayuda humanitaria en Belgrado y que aún se desconoce si en el momento del ataque iba hacia Kosovo o volvía de esta provincia serbia administrada por Naciones Unidas.

Susan Manuel tampoco pudo precisar la localidad en la que fue atacado el vehículo de la ONU en que viajaba Drogan o la identidad de los asaltantes. Tras el ataque, Drogan y un subordinado que lo acompañaba lograron llegar hasta Kosovo y el herido fue atendido en el hospital de la base Bondsteel del contingente estadounidense de la Fuerza Internacional (Kfor), en el sur kosovar. El acompañante, Vladímir Azalomov, no sufrió lesiones, indicó Manuel.

Las tropas yugoslavas se retiraron de Kosovo y también de una franja de seguridad de cinco kilómetros en junio pasado, tras 78 días de bombardeos de la OTAN, y la provincia quedó a cargo de la Unmik y la Kfor.

Mientras, los países miembros de la OTAN aceptaron ayer un plan para reforzar los efectivos de la Kfor y flexibilizar su despliegue, de modo que puedan acudir con agilidad a puntos conflictivos como, por ejemplo, la ciudad norteña de Mitrovica, escenario de los últimos enfrentamientos entre serbios y albanokosovares.

Los 19 aliados se fijaron en el Consejo Atlántico del pasado viernes un plazo de reflexión para adoptar esa decisión, que expiró ayer sin que ninguno de ellos la rechazara, según señalaron fuentes de la OTAN. La Alianza no ha comunicado cuántos soldados se enviarán de refuerzo, aunque la idea es que el contingente recupere el volumen que tenía cuando se inició la misión en junio pasado, cuando la Kfor contaba al principio con 48.000 soldados pertenecientes a 30 países.