Los gastos del Consell suman 48.000 millones más que los ingresos en el cierre de noviembre
La liquidación parcial de las cuentas de la Generalitat correspondiente al pasado mes de noviembre refleja un desfase entre el presupuesto de ingresos y el presupuesto de gastos que se eleva a 47.945 millones de pesetas. Las modificaciones en el capítulo de gastos sobre el presupuesto inicial aprobado por las Cortes suman 122.065 millones, mientras que los aumentos en las partidas correspondientes a ingresos se quedan en 74.119. Al margen del desfase, los ingresos pendientes no dejan de ser expectativas de cobro mientras que las facturas acumuladas responden a gastos comprometidos.
El presupuesto de la Generalitat, como el balance de cualquier empresa, debe reflejar cantidades idénticas en los capítulos de ingresos y gastos, el equivalente al activo y el pasivo de cualquier sociedad. Los cierres parciales de las cuentas, que la Generalitat debe remitir a las Cortes cada mes, reflejan a veces ligeros desfases, pero una desviación de 48.000 millones resulta alarmante.Fuentes de la Consejería de Hacienda restan importancia al desfase que refleja la información oficial correspondiente al cierre de noviembre y aseguran que la liquidación del presupuesto del conjunto del ejercicio, que ya debía estar elaborada, no entraña mayores problemas. Pero las cuentas de noviembre dejan entrever un déficit próximo a los 50.000 millones de pesetas.
El presupuesto aprobado por las Cortes a finales de 1998, que responde a las previsiones del Consell, ha sufrido notables alteraciones en algunos capítulos de gasto.
Es significativa la desviación en gastos de personal, la partida que recoge la nómina de los empleados públicos. El Consell elevó las previsiones sobre el ejercicio anterior poco más de un 2% y el presupuesto inicial para gastos de personal sumaba 411.237 millones de pesetas. Sin embargo, a lo largo del ejercicio se han introducido alteraciones que han elevado la nómina de la Generalitat a 440.516 millones, una desviación de más de 29.000 millones que supone más de un 7% en términos relativos. La recolocación de funcionarios en comisiones de servicios en puestos que no corresponden con su categoría profesional explicaría parte de ese desfase.
El aumento más espectacular se produce en la Consejería de Educación, donde el aumento de la nómina suma 14.000 millones, seguida de cerca por Sanidad, donde el desvío sobre el presupuesto inicial es de 12.000 millones.
La partida de gastos de funcionamiento, que cubre las facturas para garantizar el normal desarrollo de la actividad en la Administración, había subido a finales de noviembre poco más de 5.000 millones de pesetas sobre lo previsto inicialmente, una desviación relativa de un 4% sobre los 109.521 millones que recogía el presupuesto inicial.
El capítulo de transferencias corrientes refleja el mayor aumento absoluto en el capítulo de gastos. Los 332.460 millones recogidos en el presupuesto inicial se habían elevado a 409.427 a finales de noviembre. Sanidad es el área donde más han crecido las transferencias corrientes, en torno a los 40.000 millones de pesetas, para poder hacer frente a un problema endémico de la Administración autonómica, el aumento desbocado del gasto farmacéutico.
Recorte de inversiones
Las inversiones reales de la Generalitat, en contra de la tendencia general, descienden notablemente sobre el presupuesto aprobado por las Cortes. La dotación original para las inversiones que ejecuta el Consell sumaba 128.407 millones, pero a finales de noviembre se había reducido en torno a un 15% para situarse en 111.132 millones. La rebaja de 17.000 millones pretendía, según un acuerdo del Consell adoptado a mediados de agosto, hacer frente a compromisos de pago que se arrastraban de ejercicios anteriores en las áreas de Educación y Sanidad, pero el ahorro logrado por el recorte de inversiones resulta claramente insuficiente.
Sólo la partida de gastos de Farmacia que se trasladó desde 1998 a los primeros meses de 1999 se elevaba a 37.000 millones de pesetas.
En términos relativos sorprende el aumento de los gastos asumidos por Presidencia de la Generalitat, un 231% sobre el presupuesto original de 7.027 millones, que se eleva hasta 23.298. La remodelación del Consell y la creación de dos vicepresidencias explicarían el desfase.
Cristina Moreno, portavoz del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, recordó ayer que el plazo legal para presentar la liquidación del presupuesto de 1999 "venció el pasado 15 de febrero". Y atribuyó el retraso en la presentación de las cuentas a la necesidad de "maquillar" los números para ofrecer datos felices en "plena campaña electoral".
Moreno también comentó: "No se puede olvidar que el año pasado se presentó una liquidación presupuestaria con superávit cuando luego hemos sabido por el Síndic de Cuentas que ese mismo presupuesto tenía un agujero de casi 80.000 millones de pesetas". El informe de la Sindicatura de Cuentas relativo al ejercicio de 1998 recoge, efectivamente, gastos comprometidos sin cobertura presupuestaria por esa cantidad.
El problema se ha extendido al ejercicio de 1999, según refleja el informe de la Intervención General de la Generalitat correspondiente a finales de noviembre.
La portavoz socialista destacó que los informes oficiales señalan "la mala gestión y el descontrol" del Consell que preside Eduardo Zaplana.
Moreno anunció toda una batería de preguntas parlamentarias relativas al desfase contable de finales de noviembre y recordó que los socialistas solicitaron en septiembre una comparecencia del consejero de Economía y Hacienda para que explicara la ejecución presupuestaria.
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