El 'negro de Banyoles' será repatriado como cadáver o como paquete postal
¿El negro de Banyoles deberá ser repatriado como un simple paquete postal envuelto en papel de embalar o merece el reposo de un baúl y el trato solemne de un cadáver? Esta es una de las cuestiones que se planteará la comisión mixta que ayer se constituyó en Madrid, integrada por el Ayuntamiento de Banyoles y los ministerios de Asuntos Exteriores y de Cultura, para determinar las condiciones de la repatriación del guerrero disecado del Museo Darder. Si el traslado del bosquimano se equipara a la repatriación de un cadáver, será necesario cumplir con unas condiciones técnicas y legales distintas a las que requiere el envío de una pieza de museo.
El alcalde de Banyoles, Pere Bosch, acompañado de dos concejales del ayuntamiento, participó ayer en una reunión en Madrid que duró unas dos horas. Este encuentro en la sede de Asuntos Exteriores constituye el primer contacto de las autoridades locales y las estatales desde que el consistorio decidió ceder a las presiones ministeriales encaminadas a devolver al bosquimano a su lugar de origen.
Todo parece indicar que el país que recibirá los restos del hombre disecado será Botsuana, la antigua Bechuanalandia, situada en el extremo sur del continente africano.
