BBVA y Telefónica se alían para conquistar Internet

Telefónica y el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) descolocaron ayer todo el mapa empresarial e incluso político. Los dos grupos con mayor valor en la Bolsa española han forjado una "alianza global" de carácter intersectorial y con una ambición extrema. El acuerdo, que reventó los mercados financieros al saltar a la luz, está basado casi exclusivamente en los negocios de Internet, el comercio electrónico y la telefonía móvil. Es la apuesta definitiva en lo que se ha dado en llamar "la nueva economía" y que, eufemísticamente, en el ámbito del banco denominan "participación global en el mercado financiero global de Internet".Esta alianza tan "global", un enorme acuerdo que consta de 14 actuaciones específicas, se reflejará en la adquisición del 3% del BBVA por parte de Telefónica y el aumento hasta el 10% de esta compañía por parte del banco y en el cruce de vicepresidentes. Para el BBVA, que hoy celebra junta de accionistas, supondrá una inversión de más de medio billón de pesetas (unos 350.000 millones por el 2% de Telefónica que adquirirá en Bolsa y entre 150.000 y 200.000 para desarrollar los otros compromisos), mientras para la operadora telefónica el esfuerzo rondará los 400.000 millones (la mitad más o menos dedicada a comprar el 3% del banco).

El acuerdo afianza la autonomía de Juan Villalonga, cada vez más alejado del Gobierno que le elevó a la presidencia de Telefónica. Villalonga, al que este acuerdo le otorga una vicepresidencia del BBVA, ha buscado en el banco la compañía de un caballero blanco que le diera un apoyo incontestable en su carrera divergente con La Moncloa.

No tuvo tiempo el Consejo de Ministros de ayer de valorar el alcance de la noticia. No obstante, el ministro portavoz, Josep Piqué, habló posteriormente y oficialmente consideró "positiva" la alianza "porque es bueno que España tenga una participación significativa en la sociedad de la información", informa Efe. En Economía, el portavoz oficial fue escueto: "No entramos a valorar operaciones entre empresas privadas".

Desde la oposición llovieron las frases lacerantes. Por ejemplo: "Aznar los cría, Rato los bendice y ellos se juntan" (Juan Manuel Eguiagaray, portavoz socialista); "hay un emporio económico que pone condiciones al poder político" (Pedro Antonio Ríos, portavoz de Economía de IU). La izquierda recordó que en el acuerdo también es protagonista Francisco González, que fue nombrado presidente de Argentaria por el Ejecutivo del Partido Popular.

Pero fuera del terreno político, la operación abre nuevas perspectivas: las alianzas entre entidades de distintos sectores. Es algo que Francisco González viene predicando desde hace tiempo; pero que, quizá por el escaso tamaño de Argentaria, no logró plasmar en algo concreto. Ahora, con un banco de cerca de 40 billones de activos (el segundo del país), las cosas han cambiado rotundamente y el banco que preside con Emilio Ybarra se abre paso en un grupo de dimensión internacional que estará (está ya) presente en todos los negocios de futuro: Internet, la telefonía móvil y la información. Un triángulo de oro que también adoran en el gran competidor, el BSCH, que ayer se cayó del podio de los valores más capitalizados en Bolsa.

La apuesta de las dos entidades penetra en todos los huecos. Uno de ellos, la banca por Internet a través del Uno-e, que se quedará con la ficha bancaria del Comercio, cuyas oficinas casi en su totalidad y empleados (3.000) se integrarán en el BBVA.El Banco de España no permite que una entidad no financiera tenga más del 20% de un banco hasta que no pasen 15 años de su constitución. Por ello, la trampa ha consistido en adquirir una ficha que superaba ese límite de edad. Al margen de otros puntos, el BBVA acompañará a Telefónica en todos los concursos a los que se presente en Europa (incluida España) de la nueva tecnología de móvil UMTS con el 5% del capital. Misión ésta para la que está llamada La Caixa, el otro socio del núcleo estable de Telefónica, que ahora se ha quedado desmarcado del grupo.