La Seguridad Social obtiene más de 500 millones por la venta del parque Tibidabo

La Seguridad Social ejerció el pasado 27 de enero su derecho de tanteo y se quedó con el parque Tibidabo para vendérselo al Ayuntamiento de Barcelona. Julio Gómez-Pomar, director general de la Tesorería de la Seguridad Social, informó ayer de que el precio final acordado con el Ayuntamiento asciende en realidad a 1.748 millones de pesetas, de los cuales más de 500 millones quedarán en la Tesorería. Del dinero restante, 700 millones se dedican a deudas con las arcas públicas, otros 214 millones para cubrir gastos de hipotecas y embargos, aproximadamente unos 300 para cancelar otras cargas financieras y 400 millones más por el aparcamiento. De esa forma, el Ayuntamiento de Barcelona se hace con el Tibidabo libre de cargas.

"El Ayuntamiento es el que mejor garantiza el futuro del parque y de los 70 puestos de trabajo", aseguró Gómez-Pomar. El alcalde de Barcelona, Joan Clos, ha manifestado su intención de reabrirlo al público en primavera. Sobre el interés del anterior propietario, Parques de Atracciones Tibidabo, SA (PATSA), por adquirir los bienes del parque, el director general de la Tesorería afirmó que "esta empresa ha tenido mucho tiempo para haber solventado sus deudas". Desde 1994, PATSA mantenía una deuda por 700 millones de pesetas, que llevó al embargo de los bienes y a la posterior subasta.

Los pequeños accionistas de Grand Tibidabo se reunirán la próxima semana con el gerente del Ayuntamiento de Barcelona, Ramón Seró, "para buscar soluciones que eviten un perjuicio irreparable a los pequeños accionistas, así como a los trabajadores y acreedores".

La Tesorería deberá ahora reintegrar a la empresa Chupa-Chups los 791 millones de pesetas depositados tras la subasta en enero último por las instalaciones y los terrenos del parque de la montaña del Tibidabo. Fuentes de esta empresa manifestaron ayer que no tenían información de la operación y que, por tanto, no habían decidido si recurrirán la sentencia, informa Europa Press.

Tras pasar a manos del Ayuntamiento de Barcelona, el parque entrará en funcionamiento en abril próximo, inicialmente bajo gestión municipal, aunque el alcalde Joan Clos adelantó que convocará un concurso para que lo explote un promotor. El Grand Tibidabo recibía más de 474.000 visitantes al año y generaba ingresos por 1.561 millones de pesetas.