El PP acepta que la Cámara de Cuentas fiscalice las arcas de Cádiz

El pleno del Ayuntamiento de Cádiz aprobó ayer por unanimidad solicitar a la Cámara de Cuentas Andaluza que efectúe una auditoria sobre los ejercicios presupuestarios del consistorio gaditano desde 1991 a 1999, así como un análisis económico-financiero prospectivo de esta Corporación local para conocer "la situación real" de las arcas municipales gaditanas. A este acuerdo de todos los grupos políticos, se llegó después de que el gobierno local del PP no hiciese uso de su mayoría absoluta para enmendar, como a priori tenía previsto, una propuesta inicial del grupo municipal socialista-progresista, en la que planteaba que la Cámara de Cuentas fiscalizase el ejercicio del año pasado con la idea de contar con "una imagen rigurosa y fiel de la situación económica financiera" el Ayuntamiento de Cádiz. Con esta iniciativa, la portavoz socialista, María de la O Jiménez, perseguía obtener "información verídica" sobre la economía del consistorio de la capital gaditana, "convencida -según afirmó- de que el PP falsea los datos económicos". "Sólo así podremos saber lo mal que están las arcas municipales y que medidas hay que tomar en los siguientes ejercicios para no arruinar irresponsablemente nuestro Ayuntamiento", dijo Jiménez.

Teófila y Gil

El PP no tenía previsto aprobar esta solicitud tras la presentación de una enmienda, en la que no aceptaba los planteamientos socialistas. Fue entonces, cuando la portavoz socialista comparó a la alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, con el alcalde de Marbella, Jesús Gil, tras señalar que en la historia de la democracia tan sólo el Ayuntamiento de Marbella se había negado a la intervención de la Cámara de Cuentas. Estos argumentos forzaron a Martínez a retirar la enmienda y aceptar la actuación de este organismo regional independiente. El PP, con todo, introdujo un importante matiz, gracias al cual la Cámara de Cuentas tendrá vía libre para fiscalizar no sólo el año pasado, sino los últimos ocho años, en los que han gobernado tanto el PP, como el PSOE.

El acuerdo final se produjo después de que los portavoces de ambas formaciones intercambiasen fuertes acusaciones. A las críticas de María de la O Jiménz acusando a los populares de adoptar "un comportamiento antidemocrático", le respondió el portavoz popular, José Blas Fernández: "Usted miente como un bellaco, políticamente hablando, porque las cuentas están a su disposición. Lo que ocurre que en el periodo de exposición usted estaba de vacaciones de Navidad comiéndose el rosco de Reyes".

El tono crispado del debate continuó durante toda la sesión. Martínez acusó a los ediles de la oposición de "maleducados e irrespetuosos", al ser interrumpida en una de sus intervenciones. Jiménez le contestó: "Es muy difícil que usted, que se dirigió un día a un miembro de la oposición llamándole mamporrera y diciéndole que le daba asco, pueda dar clases de educación a nadie".