Gerry Adams rechaza el ultimátum unionista para el desarme en el Ulster

Los republicanos norirlandeses rechazaron tajantemente anoche un ultimátum protestante para el desarme de las fuerzas paramilitares católicas y advirtieron de que la impaciencia de los unionistas puede desencadenar una nueva crisis en el proceso de paz en el Ulster. En la más clara señal de que el proscrito IRA todavía no piensa rendir sus arsenales a la Comisión Internacional de Desarme presidida por el general canadiense John de Chastelain, el líder del Sinn Fein, Gerry Adams, aseguró que "no es fácil conseguir que el IRA, o, para tal efecto, cualquier otra organización, proceda al desarme. Ésa es la realidad". En declaraciones formuladas en Newry, Adams calificó de "error estatégico fundamental tratar de forzar el desarme mediante la marginación de un partido y su electorado. Estoy a favor del desarme, pero debo decir que este objetivo está siendo utilizado por los unionistas como una pelota de fútbol".El primer ministro del Ulster y presidente del Partido Unionista del Ulster, David Trimble, ha reiterado sus amenazas de dimitir si el IRA no comienza a entregar sus armas a partir del próximo lunes. Trimble y tres de sus principales partidarios que forman parte del Ejecutivo ya han firmado sus cartas de renuncia con fecha abierta, dijeron fuentes políticas. Las dimisiones provocarían instantáneamente la disolución del Gobierno de coalición entre protestantes y católicos.

El IRA ha resistido las enormes presiones de Londres y Dublín para entregar sus arsenales. Fuentes republicanas en Belfast calificaron semejante paso como más que improbable, pues equivaldría a una rendición. En medios políticos británicos se especulaba anoche que los Gobiernos de los primeros ministros Tony Blair y Bertie Ahern ya están abocados a estudiar "planes de contingencia" ante la posibilidad del colapso del Ejecutivo de Belfast. El general De Chastelain presentará el lunes un informe sobre sus esfuerzos para el desarme de católicos y protestantes.