Incidentes en las capitales vascas por la presencia en las manifestaciones de seguidores de HB

Decenas de miles de personas secundaron anoche las concentraciones convocadas por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, en las tres capitales vascas y por el Movimiento contra la Intolerancia en Madrid y otras ciudades en repulsa por el asesinato de Pedro Antonio Blanco por parte de ETA. Durante los actos de protesta en Euskadi, en los que participó Herri Batasuna, se produjeron incidentes y enfrentamientos entre ciudadanos que gritaban contra ETA y manifestantes independentistas radicales que portaban sus propias pancartas en favor del traslado de los presos de la banda terrorista.

Una vez finalizado el acto de San Sebastián, el portavoz del PNV, Joseba Eguibar, declaró que había sido un espectáculo lamentable pero a la vez un reflejo de la sociedad. El dirigente peneuvista añadió que situaciones como éstas no se arreglan "ni por decreto" e indican "la gran tarea" que tienen "por delante los partidos políticos", informa Genoveva Gastaminza. Cerca de medio millar de personas concentradas en los jardines de Alderdi Eder prorrumpieron en gritos de "asesinos" cuando cerca de un centenar de militantes de la izquierda abertzale se acercaban con una pancarta en la que pedían la paz y la vuelta de los presos. A los gritos de "nazis fuera" y "canallas" reaccionaron los independentistas vociferando "gora ETA" y entonando "que se vayan [en alusión a las Fuerzas de Seguriadad del Estado]" y "Jo ta ke Irabazi arte [golpear hasta la victoria]".En Bilbao, en el momento en el que los dirigentes de Herri Batasuna (entre otros, Jone Goirizelaia y Karmelo Landa) presentes en el acto ante el Ayuntamiento, en el que participaron miles de personas, desplegaron una pancarta con el lema "Construyendo la paz. Euskal Herria tiene la palabra y la decisión", los presentes comenzaron a gritar "asesinos" y "ETA kanpora [fuera]". Entre los asistentes estaban el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna; el diputado general de Vizcaya, Josu Bergara, ambos del PNV; y los principales dirigentes del resto de formaciones políticas, informa Aitor Guenaga. Tras 15 minutos de gritos en contra de ETA y en favor de la paz, los asistentes finalizaron con un fuerte aplauso y tres furgonetas de la Ertzaintza irrumpieron para evitar enfrentamientos entre los asistentes. En Ermua, donde al igual que en la mayoría de capitales españolas se celebró otra concentración, unas 2.000 personas rechazaron el atentado etarra.

La concentración de varios miles de personas en la plaza de España de Vitoria no logró aglutinar a las autoridades presentes tras la pancarta con el lema "Necesitamos la paz" que sostuvo Ibarretxe junto a miembros de su Gobierno y de las Ejecutivas del PNV y EA. En otro grupo permanecieron el alcalde Alfonso Alonso y el diputado general, Ramón Rabanera, ambos del PP, así como políticos socialistas, del PP y de Unidad Alavesa (UA), mientras en otra plaza contigua familiares de presos de ETA realizaban su habitual concentración de los viernes, informa Isabel C. Martínez. Las autoridades presentes no llegaron a unirse tras la pancarta tras la que se colocó el lehendakari, acompañado por el secretario general de Eusko Alkartasuna, Gorka Knörr, entre otros.

Se produjeron incidentes, que duraron unos 20 minutos, cuando una parte de quienes abandonaban la convocatoria institucional se agruparon frente a los familiares de presos. Ambos grupos intercambiaron gritos de "ETA asesina" y "PP asesino" y estuvieron a punto de llegar a las manos. Entre los participantes en los enfrentamientos pudo verse a algunos cargos socialistas y de UA.