Textilhogar amplía su oferta para dar cabida a la decoración integral

La feria Textilhogar, que el próximo domingo inaugura su 31ª edición, adapta su estructura a los nuevos tiempos. Sus organizadores, según explicaron ayer, ampliarán su oferta abriéndola a la decoración integral del hábitat. El aumento de comercios que ofrecen algo más que tejidos, obliga a Textilhogar a diversificar su oferta para entrar en sectores como el mueble auxiliar o la iluminación. Otro de los cambios es el nuevo enfoque del certamen, más orientado a los detallistas con producto europeo de calidad.

Según el director de Textilhogar, Miguel Bixquert, "es un nuevo enfoque, una puesta al día" que surge de un estudio realizado por la consultora Kurt Salmon, en el que se definen las nuevas estrategias del certamen, y que como principal premisa destaca la necesidad de especializar el certamen valenciano para poder sobrevivir a los próximos años. Una de las principales conclusiones del estudio es la necesidad de que la feria atienda una demanda creciente de los minoristas que, no sólo se dedican al textil, sino que abarcan la globalidad del diseño de interiores. "Este año ya se podrán ver algunos expositores que complementarán la oferta textil con iluminación, mueble auxiliar o marcos para cuadros", señaló Bixquert ayer en la presentación de la edición de este año. Según el director del certamen, se trata de facilitar la tarea a los clientes, que buscan cada vez más una oferta multiproducto. "Lo que hacemos es poner la semilla de lo que pretendemos que en un par de años se convierta en un salón específico dedicado a la decoración integral de grandes edificios colectivos, como son los hoteles", dijo Bixquert.

Al margen de este obejtivo, Textilhogar también ha renunciado a copiar el esquema de las grandes ferias alemanas, como el caso de la feria de textil para el hogar de Frankfurt. El certamen valenciano ha decidido centrar su objetivo en el comercio detallista, principal cliente de la feria, al que pretende fidelizar, al igual que a los visitantes. "Basándonos en el informe hemos optado por dirigirnos al pequeño comercio, al que vamos a ayudar a sobrevivir", señaló Bixquert. Entre las medidas enfocadas a ese comercio minorista en el certamen, destaca el cambio de fechas, que como primera medida tiene la apertura al público en domingo para facilitar el acceso de visitantes. También se ha optado por alejar el certamen del de Frankfurt, permitiendo además que los comerciantes puedan llegar a la feria con las existencias vacías después de las rebajas. Finalmente también se ha optado por realizar una serie de acciones tendentes a que la feria "dure en el tiempo", con acciones para detallistas, a los que se ofrecerá información fiscal o sobre tendencias. En este último caso, este año, el diseñador Santiago Nin ha sido el encargado de realizar el estudio.

Otro aspecto fundamental será el de la búsqueda de expositores y de visitantes. El certamen se centrará en el producto mediterráneo de calidad. "No queremos optar a los fabricantes que llegan a Frankfurt desde la India o de otros países orientales. Textilhogar debe lanzar la idea de producto de calidad sin competir en el precio", explicó el director del certamen. "Tampoco vamos a continuar en la lucha de aumentar año tras año el número de visitantes, ya que tampoco aumenta el número de puntos de venta", dijo Bixquert, quien explicó que se ha optado por elegir a un grupo de 1.100 compradores que son esenciales para los expositores, y para los que se ha realizado un programa de fidelización. "De la asistencia de estos compradores dependerá el éxito de Textilhogar", dijo el director del certamen.

La 31 edición de Textilhogar estará abierta del domingo 23 al 26 de enero. Participarán 480 expositores que presentarán sus colecciones de tapicería, mantelería, ropa de cama y baño, alfombras o cortinaje.