Rato se compromete a bajar los impuestos en vísperas de iniciarse la campaña electoral

El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, enfiló ayer la campaña electoral con el anuncio de que los impuestos "seguirán bajando" si el PP vuelve a conseguir el respaldo de las urnas. El compromiso consistirá, según fuentes gubernamentales, en recuperar la promesa de bajar el tipo máximo del IRPF, desde el 48% actual hasta el 40%, tal como figuraba en el programa de 1996. Pese a la reforma del IRPF que entró en vigor en 1999, la recaudación aumentó un 9%, tres puntos por encima del crecimiento económico nominal (con inflación).

Ésta es la primera vez en que un miembro del Gobierno de José María Aznar formula un compromiso electoral, a dos meses escasos de la próxima cita con las urnas. El vicepresindente Rato, que ayer participó en unas jornadas sobre Europa en la economía de Internet, lo expresó con claridad: "Los impuestos seguirán bajando si el PP renueva la confianza de los españoles".Horas antes, durante otras jornadas sobre fiscalidad organizadas por Cinco Días, el secretario de Estado de Hacienda, Juan Costa, avanzó de forma más difusa lo que después Rato elevaría a categoría de promesa para atraer votos. Ni uno ni otro dieron detalles concretos, a la espera de que se haga público el programa electoral del PP.

En un contexto de rigor presupuestario, crecimiento económico y de creación de empleo como los actuales "se puede profundizar en la reforma fiscal", explicó Costa. En la próxima legislatura, añadió, "puede existir margen para seguir trabajando en esa dirección".

La "dirección" no es otra que la rebaja del impuesto sobre la renta que el Gobierno del PP ha concretado el pasado año, el último completo de la actual legislatura. La reforma consistió en que el tipo máximo del IRPF se rebajó desde el 56% hasta el 48% y el mínimo, del 20% al 18%, con un coste para Hacienda estimado en 750.000 millones de pesetas.

Esta rebaja se quedó corta respecto de la promesa electoral del PP en los pasados comicios de 1996, ya que en su programa figuró el 40% como tipo máximo, ocho puntos menos de lo finalmente aprobado. Ahora, fuentes gubernamentales señalan que el nuevo programa electoral recuperará ese 40% como tipo máximo y el 15% como mínimo.

En el Ministerio de Economía siempre se han vanagloriado de que la reforma del IRPF español ha sido la "vanguardia" europea y no parecen dispuestos ahora a quedarse atrás. El Gobierno alemán acaba de anunciar una rebaja del IRPF que situará el tipo mínimo en el 15% y el máximo en el 45% para el 2005, frente al 23,9% y al 53% actuales.

Promesas incumplidas

Tampoco el PP cumplió el ritmo que el progama electoral de 1996 marcaba. "Se iniciará inmediatamente un proceso de reforma progresiva del sistema fiscal que permita reducir la carga de todos los contribuyentes", decía el programa. La celeridad sólo se aplicó en el caso de las plusvalías, que se pasaron a tributar a un tipo fijo del 20%, mucho más beneficioso para las rentas altas.

En julio de 1996, el recién estrenado Gobierno de José María Aznar también se saltó el programa cuando decidió subir los impuestos especiales, con la disculpa de que había que financiar un agujero presupuestario de más de 700.000 millones de pesetas heredado del anterior Gobierno socialista.

La esperada rebaja del IRPF no fue tan inmediata como se deducía del programa. Quedó para el final de la legislatura, pues se empezó a aplicar en 1999 con la reducción de las retenciones y se notará con claridad en junio de este año, cuando se presente la declaración; es decir, una vez celebradas las próximas elecciones.

La primera condición que ayer puso Costa para proseguir en esta línea es la elemental: que el PP vuelva a ganar las elecciones. La segunda es que se mantenga la actual bonanza económica y así ha de ser si se cumplen las previsiones de los organismos internacionales y la del propio Gobierno, que espera una media de crecimiento en los próximos tres años del 3,3%. Ahora, la economía española crece a un ritmo del 3,7%.

El secretario de Estado de Hacienda aseguró que el esfuerzo de este Gobierno "se ha centrado en trabajadores y pensionistas y la línea de trabajo podría ir en la misma dirección".

Más IVA que IRPF

Con igual tono propagandístico, Costa añadió que "el Partido Popular ha demostrado en esta legislatura que menos impuestos suponen más empleo y más crecimiento económico y, desde esta perspectiva, mayores ingresos y mayor recaudación para contribuir a financiar cada vez mejores políticas sociales".

Según los resultados avanzados ayer, la recaudación global del Estado aumentó un 9% el pasado año, hasta alcanzar los 15,8 billones de pesetas. Ese incremento del 9% supera en tres puntos el crecimiento económico nominal (sin descontar la inflación) esperado para 1999, que ronda el 6%.

El aumento de la recaudación se ha producido gracias al IVA, que elevó su recaudación el pasado año un 17%; es decir, casi tres veces el crecimiento económico. El IVA se ha beneficiado de un modelo de crecimiento basado en el consumo privado y del fuerte ritmo que han registrado las importaciones. Por el contrario, la recaudación del IRPF apenas ha crecido un 2,3% debido a la rebaja del impuesto y a que han disminuido de forma considerable los ingresos por retenciones del capital.