El Consejo Islámico cree que la Alhambra reconsiderará la apertura de la rauda El Patronato debate el jueves sobre el futuro del cementerio árabe
El Patronato de la Alhambra se reunirá el 13 de enero con el Consejo Islámico de Granada para estudiar la conveniencia de abrir al público el cementerio árabe (rauda), situado junto a la antigua mezquita de la fortaleza, y sobre la que luego se levantó la iglesia de Santa María de la Alhambra. El portavoz del Consejo Islámico de Granada, Lucio López, dijo ayer que la convocatoria del encuentro demuestra "el talante dialogante de Mateo Revilla", director del Patronato de la Alhambra, ya que, en su opinión, la entrevista implica la posibilidad de reconsiderar la decisión de abrir la rauda, una medida que fue considerada por este colectivo musulmán como "una blasfemia".El Consejo Islámico de Granada, compuesto por una docena de comunidades musulmanas de la provincia y recientemente reconocido como miembro de la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas, pidió recientemente al Patronato del monumento que paralizase la apertura del cementerio en el que, entre otros, fueron enterrados reyes como Mohamed I, II y III o Yusuf I.
Lucio López se mostró ayer convencido de que la iniciativa de habilitar la rauda para la visita turística a la Alhambra "ha sido sin mala intención", pero reiteró que "sería irracional" que fuese finalmente ejecutada.
El Patronato de la Alhambra emprendió en agosto pasado el acondicionamiento de la rauda para la visita de las lápidas y los jardines funerarios, una actuación que comprende también la reforma de la Calle Real Baja de la ciudadela andalusí.
Con esta actuación, la Alhambra pretende ofrecer a los visitantes (dos millones al año) un nuevo espacio dentro de las posibilidades turísticas del monumento, al que se accederá por determinadas sendas a las tumbas y jardines, y puedan observar la ordenación y orientación hacia La Meca de los enterramientos musulmanes.
El Patronato de la Alhambra, que ha dispuesto 19 millones de pesetas, había previsto abrir al público la Rauda a comienzos del año que viene.
Críticas del PP
Por su parte, el diputado del PP, Andrés Ollero, aseguró ayer que el Gobierno central se vio obligado a completar las obras de restauración de las cubiertas del Monasterio de San Jerónimo de Granada porque la dejadez de la Junta de Andalucía, encargada de las obras, dejaba el edificio en una situación de expolio. Con esta afirmación, el diputado quiso reprochar a la consejera de Cultura, Carmen Calvo, las críticas al secretario de Estado de Cultura, Miguel Angel Cortés, por sus alusiones a la gestión de la Alhambra. Ollero recordó que el Ministerio de Cultura tuvo que recurrir a un artículo de la ley estatal de Protección del Patrimonio Histórico, "hasta ahora nunca aplicado", para evitar el deterioro del monasterio.
Según el diputado del PP, dicho artículo, que prevé "la asunción por el Gobierno de competencias ya transferidas cuando la inactividad de su titular da lugar a situaciones de expolio", hizo a Calvo "desistir de su actitud", que calificó de "estúpida, "de amenazar con paralizar las obras del Ministerio de Cultura".
La intervención del Gobierno Central en el Monasterio de San Jerónimo se produjo tras la visita hace más de dos años a Granada de los presidentes del Gobierno español e italiano, José María Aznar y Romano Prodi, quienes "tuvieron noticia del grave deterioro del valioso retablo y de que había caído al suelo parte del lienzo policromado de la pared".
Todo ello, agrega Andrés Ollero, llevó al Consejo de Ministros, "considerando que se daba la situación de emergencia contemplada en la ley decidiera acometer la reparación del cimborrio y el saneamiento de una fosa".
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