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LA LUCHA CONTRA ETA

Detenida una mujer en Bilbao, acusada de ser "correo" de ETA

Jorge A. Rodríguez

La policía detuvo ayer en Bilbao a Izaro López Bidaguren, vecina de la localidad de Gernika, a la que se acusa de ser una laguntzaile o correo de la organización terrorista. Izaro López fue capturada sobre 16.15, tras ser seguida mientras se desplazaba en coche hasta la capital vizcaína. La detención fue practicada después de que la joven detuviera su coche para conversar en plena calle con una amiga, según precisaron fuentes de Interior.Con ésta ya son cuatro las detenciones practicadas en las últimas horas dentro de la operación contra el comando Vizcaya. Los otros detenidos son Jon Urretabizkaia y Guillermo Merino, los dos ocupantes del Opel Kadett a los que la policía dio el alto en Basauri, supuestamente tras fracasar un atentado contra una patrulla de la Guardia Civil. Merino es nieto de un guardia civil e hijo de un candidato de Euskal Herritarrok en las últimas municipales. El otro detenido es Julen Uriarte.

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El supuesto papel de la cuarta detenida era el de transmitir mensajes a los distintos miembros del comando Vizcaya y presuntamente habría facilitado la huida de algún otro miembro del grupo. La colaboradora fue localizada gracias a que su número de teléfono aparecía como la última llamada en el móvil del joven Oier Andueza, a quien las fuerzas de seguridad trataron de localizar sin éxito el lunes en su domicilio de Durango (Vizcaya), según fuentes de la lucha antiterrorista.

El destino del coche

Las fuerzas de seguridad mantienen la intensa búsqueda del Ford Fiesta blanco en el que supuestamente escapó Patxi Rementeria, jefe del comando. De ninguno de los dos hay rastro por el momento. Interior trabaja con dos hipótesis sobre el destino del coche, que se considera quemado o inutilizable en otro atentado debido precisamente a que ahora es objetivo prioritario de las fuerzas de seguridad. Una de las teorías es que el vehículo puede haber sido abandonado en algún punto de Vizcaya, ya sin la carga explosiva pero quizás con alguna clase de trampa o explosivo para borrar todo tipo de huellas y dificultar la tarea de desactivación. La otra es que esté escondido en un lugar seguro, un garaje o una lonja, para impedir su localización y que pueda ofrecer pistas.

El vehículo estaba supuestamente destinado a uno de los convoyes que habitualmente custodian los traslados de explosivos para uso civil. Estos cargamentos suelen ser escoltados por dos vehículos de la Guardia Civil, en cada uno de los cuales viajan al menos dos agentes. La explosión del coche bomba habría tenido efectos devastadores en el caso de que la carga del furgón custodiado hubiera explotado por simpatía, ya que, además, la zona elegida de Bilbao suele tener mucho tráfico. El cambio de trayecto de la caravana, medida de precaución normal tras la ruptura de la tregua, evitó la tragedia.

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Sobre la firma

Jorge A. Rodríguez
Redactor jefe digital en España y profesor de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Debutó en el Diario Sur de Málaga, siguió en RNE, pasó a la agencia OTR Press (Grupo Z) y llegó a EL PAÍS. Ha cubierto íntegros casos como el 11-M, el final de ETA, Arny, el naufragio del 'Prestige', los disturbios del Ejido... y muchos crímenes (jorgear@elpais.es)

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