La policía cree que el coche bomba buscado en Vizcaya contiene de 15 a 20 kilos de dinamita
El coche bomba con el que el comando Vizcaya intentó atentar anteayer contra una patrulla de la Guardia Civil en Bilbao está cargado con entre 15 y 20 kilos de dinamita, alojados en una olla para poder dirigir la onda expansiva. Ésta es la estimación de las Fuerzas de Seguridad tras examinar los envoltorios vacíos de explosivos hallados en el piso franco, descubierto en Bilbao, que ETA alquiló a finales del mes de mayo, coincidiendo con la entrevista que representantes del Gobierno y de la banda mantuvieron en Zúrich (Suiza). En la vivienda se han requisado otros 40 kilos de dinamita, cuatro armas de fuego, un lanzagranadas, nueve granadas, gran cantidad de material electrónico y documentación sobre posibles objetivos.
El material hallado refuerza la idea de que ETA tenía en marcha un atentado con coche bomba contra una patrulla de la Guardia Civil, pese a que el director general de la Policía, Juan Cotino, insistió en que se trata de una hipótesis. En el piso se encontraron envoltorios vacíos de dinamita que podrían corresponder a entre 15 y 20 kilos de este explosivo. También se localizó la tapa de una olla con capacidad de 25 litros, pero no la marmita, por lo que Cotino sugirió que el explosivo fue introducido en ésta y dispuesto para estallar en el Ford Fiesta blanco que se busca afanosamente.Cotino subrayó en Bilbao que el piso de la calle Prim, situado en el Casco Viejo, albergaba "un arsenal, altamente diverso y peligroso, almacenado desde hace meses". De hecho, fuentes de Interior aseguraron ayer que la vivienda fue alquilada por personas vinculadas a ETA a finales de mayo, en plena tregua y coincidiendo en el tiempo con el encuentro mantenido el 20 de mayo en Zúrich por representantes del Gobierno y los etarras Mikel Albizu, Antza, y Belén González, Carmen, posteriormente detenida en Pau (Francia).
La policía ha hallado en el piso hasta 80 efectos diferentes relacionados con la preparación de explosivos, con los que podrían haberse fabricado bombas-lapa (para colocar en bajos de coches), mandos de radiocontrol (para accionar explosivos a distancia) así como tubos de metal para ser utilizados como lanzagranadas.
El jefe superior de Policía en Bilbao, Enrique Barón, destacó la importancia del último arsenal descubierto, con un lanzagranadas belga modelo RL-86, cuatro tubos metálicos preparados para el disparo de granadas de carga hueca, tres granadas de fusil y otras seis Mecar, un subfusil Mat, dos fusiles de asalto Cetme, una pistola Walter, un silenciador y más de 250 proyectiles para las armas.
Además, se ha hallado abundante documentación que está siendo analizada por la policía. "Por eso no se puede decir que había un seguimiento de personas", matizó Cotino, quien rehusó ofrecer más datos sobre la documentación. No obstante, fuentes antiterroristas aseguraron que contenía información sobre posibles objetivos etarras que no quisieron precisar. Junto a ello se han encontrado ocho juegos de placas de matrículas de coches correspondientes a Bilbao y otra de San Sebastián.
El fuerte dispositivo montado para localizar el coche bomba con el que supuestamente huyó el jefe del comando Vizcaya, Patxi Rementeria, continuó ayer y se extendió a toda la provincia de Vizcaya. El Ford Fiesta que ha sido cargado de explosivos fue sustraído limpiamente el domingo en Gernika, a 30 kilómetros de Bilbao.
La Ertzaintza registró a mediodía un Opel Kadett en Durango al comprobar que llevaba matrículas falsas y que había sido robado en Bilbao el domingo. El coche que levantó las sospechas se encontraba estacionado el lunes en el barrio bilbaíno de San Adrián, donde presumiblemente se iba a acometer el atentado contra la patrulla de la Guardia Civil. El Departamento de Interior confirmó pocas horas después que el vehículo había sido abierto y revisado y que se encontraba vacío, por lo que descartó cualquier relación con la operación contra ETA.
Otro grupo operativo
La policía trabaja con la idea de que el coche bomba sólo estaba ocupado por Rementeria. Cotino sugirió que ETA puede contar con otro grupo operativo del comando Vizcaya y cierta infraestructura de apoyo, lo que habría permitido al citado liberado (a sueldo de la banda y que ya formó parte del Vizcaya hasta 1986) esconderse en un lugar seguro.
El director de la Policía, que hizo un llamamiento a la ciudadanía para que avise sobre cualquier vehículo sospechoso, subrayó el arrojo y profesionalidad de los dos agentes que detuvieron en Basauri, localidad del cinturón de Bilbao, a los dos etarras que viajaban en el Opel Kadett con el que supuestamente pretendían facilitar la huida de Rementeria tras el atentado fallido.
