Una red prometía trabajo de niñeras a colombianas y luego las prostituía
Más de una veintena de mujeres colombianas, la mayoría de entre 18 y 22 años, llegaron a Madrid en los últimos seis meses con la promesa de trabajar como niñeras y terminaron prostituidas en diversos clubes de alterne de la Comunidad. El pasado sábado, la Guardia Civil detuvo a los cinco integrantes de la red que se encargaba de captar a las jóvenes. Tres de ellos son colombianos, y los otros dos, de origen iraní.La banda estaba formada por dos matrimonios y el hermano de uno de los cónyuges. Los detenidos son B. B. G., de 32 años; su esposa, R. R. B., y los esposos H.M. M., de 26 años, y S. E. R., de 31. Esta última mujer reside habitualmente en Colombia y, según la Guardia Civil, se dedica desde allí a captar a las mujeres, a las que promete un trabajo estable. El otro detenido es M. R. A., de 22 años, hermano de H. M. M.
Antes de viajar a España, las mujeres obtenían de la red, según fuentes de la Guardia Civil, una bolsa de viaje que incluía pasaporte, carta de presentación y 2.000 dólares para justificar su estancia en territorio europeo. Una vez en España, la organización les despojaba de la bolsa de viaje y trasladaba a las chicas hasta uno de los dos pisos que los miembros de la banda tenían en Madrid. Entonces se les informaba de que habían contraído una deuda que se aproximaba al millón y medio de pesetas, y que debían saldar a plazos y con el ejercicio de la prostitución en clubes de alterne de la capital y de la localidad de Pinto.
Los miembros de la banda, según la Guardia Civil, se quedaban con gran parte de las ganancias de las mujeres. Sólo les dejaban lo justo para subsistir, y a veces llegaban al maltrato físico cuando éstas se negaban a darles dinero. La operación del instituto armado no ha concluido todavía, pues en el momento de la detención se encontró abundante documentación, que aún es materia de investigación.
Los detenidos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Alcobendas. Cuatro ingresaron en la prisión de Soto del Real. El quinto quedó en libertad con cargos.
