Cervera anuncia un plan estratégico de Sanidad para intentar "racionalizar" el gasto farmacéutico

El consejero de Sanidad, José Emilio Cervera, se dio ayer un plazo de seis meses para comenzar a ver los resultados de un plan estratégico de racionalización del gasto farmacéutico que su departamento aprobó recientemente. Cervera hizo estas declaraciones en el Hospital General de Alicante, donde inauguró la nueva Unidad de Custodia y Hospitalización de enfermos procedentes de la prisión de Fontcalent."El gasto farmacéutico no se solventa de una manera singular o simple, sino haciendo compatible lo que es la sociedad del bienestar: el derecho de los pacientes a tener unas prescripciones correctas, y el deontológico de los sanitarios a poder prescribir con libertad en función de las características de los pacientes", argumentó el consejero de Sanidad. Las medidas que su departamento impulsará de forma inmediata requieren también "de una racionalización presupuestaria y económica", añadió.

Cervera resaltó que la unidad inaugurada ayer "permitirá ofrecer un trato sanitario de primera calidad a pacientes que presentan unas condiciones socialmente complicadas". La planta ya se encuentra en funcionamiento y sustituye a la unidad de atención sanitaria a reclusos que funcionaba en el Hospital de San Juan.

La Unidad de Custodia y Hospitalización de presos, instalada en la novena planta del Hospital General de Alicante, cuenta con seis habitaciones individuales, que pueden convertirse en dobles cuando sea necesario. Cinco auxiliares técnicos sanitarios y cinco auxiliares clínicos conforman el personal designado a esta área. Según los datos que baraja Sanidad, por este servicio pasa una media anual de 130 pacientes, que suelen permanecer ingresados unos siete días.

El efecto 2000 no preocupa a Cervera. Aseguró que la Consejería ha puesto en marcha un plan de coordinación sanitaria que se aplica en todos los hospitales valencianos desde hace un mes. Las medidas contemplan un refuerzo de los turnos y un acopio de materiales. "Será una noche como cualquier otra, pero estamos obligados a tomar precauciones especiales", dijo Cervera.