Una exposición recuerda en Granada la evolución de las escuelas andaluzas

El Palacio de Bibataubín, en Granada, acoge desde ayer la exposición itinerante On: Arquitectura para una educación, que muestra la evolución de los centros escolares a lo largo de los años y que pretende divulgar los valores docentes, arquitectónicos y medioambientales de la Junta de Andalucía. La exposición, que se exhibirá en Cádiz, Málaga, Sevilla, Almería, Jaén, Córdoba y Huelva, es un recorrido por el diseño de los colegios a través de los años y la importancia que el entorno arquitectónico tiene en la educación.

Arquitectura para una educación hace especial hincapié en cómo empezaron a diseñarse los centros escolares a partir de la puesta en marcha de la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE) en 1990 que establecía, entre otros aspectos, que los espacios arquitectónicos escolares también forman parte de la educación.Partiendo de esa base, la muestra ofrece, mediante paneles iluminados, lo que ha sido la historia de la arquitectura de colegios a lo largo de los años, desde las viejas escuelas de pueblo hasta los actuales centros universitarios. La exposición recoge asímismo diferentes reflexiones, como la que escribió el periodista Luis Bello tras un viaje por Andalucía en los años veinte: "Tierra de caquices no dará nunca escuela", anotó. "En la ignorancia del pueblo se funda su poder".

La exposición, que fue inaugurada ayer tarde por el consejero de Educación de la Junta de Andalucía, Manuel Pezzi, se centra sobre todo en la evolución de los centros escolares desde que el Gobierno andaluz se hizo con las competencias de la educación en 1983. También trata de explicar los proyectos de cara al futuro, como el Plan Aula 2000, al que se han sumado más de 400 municipios andaluces.

Educación obligatoria

Arquitectura para una educación resalta, sobre todo, la enorme evolución que se ha producido en el mundo escolar. Uno de los módulos explica que todavía a mediados de este siglo, Andalucía se dividía entre quienes iban a la escuela y quienes no. La educación obligatoria y la adaptación de los centros a las necesidades del aprendizaje (la escuela con sus zonas de aulas, zonas de servicios, gimnasio) representan uno de los grandes saltos cualitativos que se han producido en las últimas décadas.

"Hoy he visto funcionar melancólicamente esas escuelas", volvía a reflexionar el periodista Luis Bello en los años veinte. "No hay campo ni patio de juegos. Las clases, húmedas, bajas, decrépitas, dan la misma impresión de sordidez que las escuelitas de pisos alquilados".

Los paneles muestran las fotografías de los diferentes centros que existen actualmente en Andalucía y que son un ejemplo de la arquitectura moderna aplicada a las necesidades de la educación. La ley establece que los colegios deben responder a las variables urbanas, ser lugares que revitalezcan los barrios y deben adecuarse al entorno. La exposición se mostrará en Sevilla coincidiendo con el Salón Internacional del Estudiante, en la Isla de la Cartuja a partir del próximo año, tras haber pasado por el resto de capitales andaluzas.