El comercio de Barcelona factura tres billones anuales y emplea a 150.000 personas
La facturación del comercio barcelonés asciende a tres billones de pesetas, de los que 1,2 billones corresponden a establecimientos minoristas y 1,8 billones al comercio mayorista. En total, la ciudad tiene 31.071 establecimientos abiertos a todo tipo de público. Un tercio está dedicado a la alimentación (10.695). Los distritos con mayor oferta comercial son los de Eixample, Ciutat Vella y Sant Martí. En el sector mayorista, el del Eixample sigue siendo el distrito con mayor número de centros, seguido de Sants-Montjuïc. El sector da empleo a más de 150.000 personas.
El año 1999 será el mejor de la década de los noventa desde la perspectiva comercial. Así lo explicó ayer Maravillas Rojo, concejal responsable del área de Comercio en el Ayuntamiento de Barcelona. Rojo afirmó que el crecimiento de las ventas se sitúa entre el 2% y el 3%, según datos de bancos y cajas, pero que llega hasta el 10% en ciertos sectores de negocio, lo que no supone que a todo el mundo le haya ido bien.Maravillas Rojo hizo estas declaraciones con motivo de la presentación del primer análisis detallado del comercio en Barcelona. Se trata de un estudio que describe la situación comercial y permite descubrir las tendencias generales de ésta.
La ciudad dispone de una superficie comercial que alcanza los 2.295.490 metros cuadrados, de los que más de medio millón están ocupados por el sector de la alimentación. El número de empleados es de 152.543, según datos de afiliación a la Seguridad Social. De ellos, dos tercios trabajan en el comercio minorista y el resto en el mayorista. No obstante, la facturación es casi inversa. Las ventas al detall suponen un negocio de 1,2 billones de pesetas, mientras que las mayoristas suman 1,8 billones, un tercio del total de Cataluña.
El comercio mayorista se concentra en los distritos de Eixample y Sants-Montjuïc, aunque los datos de éste quedan desvirtuados por la presencia de las instalaciones de Mercabarna. En el ámbito minorista, Barcelona dispone de mayor número de comercios por cada 1.000 habitantes (206) que el conjunto de Cataluña (179), España (151) y la Unión Europea (118).
La mayor densidad comercial se da en el distrito de Ciutat Vella, donde hay un centro comercial minorista por cada 25 habitantes, seguido del Eixample, con un comercio por cada 34 habitantes. La media general de Barcelona es de un comercio por cada 48 habitantes. El distrito con peor razón es el de Horta, donde por cada tienda hay 74 habitantes.
El informe recoge también la tendencia general de los ciudadanos y señala que éstos tienden a realizar la compra de los productos alimenticios en el propio barrio y que no dudan en desplazarse para otros asuntos, entre los que destacan el equipamiento personal y lo relacionado con el hogar.
Maravillas Rojo aseguró que se advierte una notable proyección de ciertos ejes comerciales como los de Sant Antoni, paseo de Gràcia, La Rambla y plaza de Catalunya, Barnacentre, Gran de Gràcia, Sants y Sant Andreu.
El éxito de estos puntos, que se propaga a sus inmediaciones, obedece a la coincidencia de varios factores, explicó Rojo. El primero, la presencia de un asociacionismo activo que realiza la promoción comercial de la zona; el segundo, la voluntad de la renovación de gestión; finalmente, la mejora del entorno urbano, especialmente si coinciden una cierta peatonalización, que no supone la supresión total del tráfico rodado, y una concentración que puede ser fácilmente identificada por el público.
La concejal de Comercio aprovechó para hacer un llamamiento a los grandes centros comerciales para que se sumen al movimiento asociativo ya que, dijo, en estos momentos se da a veces la paradoja de que unos pocos asumen el trabajo y los gastos y de ello se benefician muchos otros que no participan en el movimiento.
Los datos de la radiografía del comercio barcelonés corresponden al ejercicio de 1998, añadió Maravillas Rojo, pero son extrapolables a 1999. La concejal prometió los datos actualizados para primavera.
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