Un hombre denunciado por malos tratos mata a su esposa en Écija
La víctima, que había vivido en hogares de acogida, se dirigía a tramitar su separación
La muerte sorprendió a María del Carmen Romero, de 32 años, de camino a los juzgados. La mujer, refugiada en hogares de acogida de la Junta de Andalucía tras los ataques de su cónyuge, murió en la noche del miércoles apuñalada precisamente por su esposo, Francisco E. R., de 39 años. Para cometer el crimen, el hombre, siempre según la versión de la policía y los testigos, esperó la llegada de María a la estación de autobuses de Écija (Sevilla), ciudad donde ella iba a tramitar su separación. Dos puñaladas se lo impidieron. La víctima había denunciado hasta tres veces a Francisco.
Francisco E. R., según varios testigos, esperó a María del Carmen más de ocho horas en la estación de autobuses. El hombre sabía que ella tenía que desplazarse hasta Écija (37.000 habitantes) para cumplir con los trámites de separación, su mayor anhelo tras años de malos tratos. Al salir del autobús, y tras una breve discusión en la que el supuesto agresor le recriminó que no le dejase ver a sus cuatro hijos, le apuñaló en el cuello, la cara y el pecho con una navaja de 12 centímetros. Luego la dejó tirada en el aparcamiento de la estación.La hermana de la víctima, Sofía Romero, de 29 años, que se encontraba esperándola, se abalanzó contra el agresor. Éste le clavó el estilete en el pecho. Sofía huyó corriendo hasta el bar Jardín, a 300 metros de la estación, donde se escondió en los servicios. Un camarero, Raúl León, quien atendió en un primer momento a la mujer, recuerda sus gritos: "¡Ha matado a mi hermana y ahora viene a por mí!". León llamó a la policía y a la ambulancia. Cuando llegaron, María del Carmen Romero ya había muerto. Su hermana fue trasladada en estado grave hasta el hospital de Écija.
La policía, tras interrogar a varios testigos, se dirigió hasta el domicilio de Francisco E. R., donde fue detenido. Una vez en los calabozos de la comisaría de Écija, el detenido le comunicó a los agentes que se encontraba mal ya que había tomado una sustancia venenosa (un herbicida, segú se comprobó más tarde) antes de que la policía llegara a su casa. Fue trasladado hasta el Hospital Comarcal de Úbeda.
María del Carmen fue acogida, junto a sus cuatro hijos, el pasado 28 de mayo en un hogar para mujeres maltratadas de la Junta de Andalucía en Sevilla. El motivo, según la directora del Instituto de la Mujer de Sevilla , Araceli Rubio, tras fue una denuncia contra el marido por una agresión en Ayamonte (Huelva)-el matrimonio trabajaba como temporeros en el campo y se desplazaba continuamente por Andalucía-. La policía, sin embargo, informó de que al menos había tres denuncias por malos tratos contra Francisco E. R., y que éste había denunciado a su mujer por negarle ver a sus hijos.
La directora del Instituto de la Mujer explicó que el supuesto agresor descubrió el pasado verano a Romero paseando por una calle de Sevilla, y desde entonces no dejó de acudir a las oficinas de la Administración autonómica preguntando por su mujer y sus hijos. Ésta pidió el traslado y se les buscó plaza en un hogar en Almería, ya que podría encontrar fácilmente trabajo, instalándose el 30 de agosto. Rubio aseguró que, tras unos meses, esta mujer y sus hijos reanudaron su vida. "Ella encontró trabajo en el campo, abandonó el hogar y alquiló un piso", comentó.
Rubio afirmó que si la víctima hubiese informado de su viaje a Écija se le hubiese ofrecido protección policial, "como se suele hacer en estos casos". Pero no fue así. Describió al supuesto agresor como un hombre "peligroso", que trataba siempre de "engañar a los técnicos del Instituto" y que "llegaba llorando hasta las oficinas diciendo que quería ver a sus hijos".
La primer teniente de alcalde de Écija, Lucía Rosado, comentó que el detenido tenía continuos problemas con el alcohol, aunque estaba en proceso de rehabilitación.
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