Actos reflejos
EUGENIO SUÁREZ PALOMARESLa utilización, por parte de la candidata del PP a la Presidencia de la Junta de Andalucía, de un lenguaje belicista contra el presidente de nuestra comunidad, calificándole de ultra y provocador de enfrentamientos con el Gobierno central, ha sido contestada. El partido socialista exige en abandono de este discurso.
Aquí terminaría la historia. Sin embargo, puede que esta forma de hablar sea algo más. Puede que sean actos reflejos de una forma de hacer política. Basta mirar al norte para atreverse a pensar que la derecha no ha cambiado. Los problemas se resuelven o no se resuelven.
La tristeza nos invade como consecuencia de la ruptura de la tregua de ETA. Esta ruptura puede dar lugar a que los terroristas enseñen a sus hijos, que cuentan con dos piernas y todo lo demás, cómo se monta un portal de Belén y celebren la Navidad y el atentado por venir, pero también ha conseguido que la sociedad trate de prolongar las noches de paz.
Es posible que algunas decisiones políticas sean difíciles de entender. Es el caso del PNV, pero su postura no debería ser rechazada por el presidente del Gobierno mediante el uso de un lenguaje belicista. No puede limitarse a decir que hay que elegir entre el euro o Kosovo, mentar a Hitler o afirmar que en el norte de España hay depuración étnica, cuando lleva cuatro años gobernando con los nacionalistas sin decir este RH no es mío. Es un discurso peligroso. Se abandona el diálogo, la razón y se coloca a un lado de la línea a los amigos y, en el otro, a los demás, cuando los demás sólo son unos, los que matan.
No resulta extraño, pues, que, con este mentor, Teófila Martínez copie el discurso, pero ya debería conocer que así no se abona una tierra de olivos, símbolo de paz, convivencia y razón, que explican, sin querer, una forma de ser y de vivir. Una forma que huye de las imposiciones y de los belicismos que no pueden dar, a pesar de la opinión de Arzallus, los votos que les niega el norte y cuantos pensamos que el diálogo y la generosidad son los cauces a través de los que se alcanza el derecho a vivir en libertad.
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