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Los funcionarios de la Generalitat se movilizan ante la ausencia de una oferta salarial global de Zaplana

La falta de acuerdos sobre la subida salarial de los 85.000 funcionarios públicos de la Generalitat Valenciana, antes de que se cerrara el periodo de enmiendas a los Presupuestos el 30 de noviembre, ha tensado la cuerda entre los sindicatos y la Administración. Las federaciones de servicios públicos, justicia, sanidad y enseñanza de UGT, STEPV, CC OO y ANPE anunciaron ayer un calendario de paros parciales a partir del día 10 que culminarán en una manifestación el 14 de diciembre ante "la incapacidad del Gobierno de Zaplana para presentar una oferta global de negociación".

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"La Comunidad Valenciana es, una vez cerrados los últimos dos pactos en las comunidades de Castilla-La Mancha y de Baleares, la única cuyo gobierno no ha tenido capacidad para hacer una oferta global en la mesa general de la función pública y cerrar acuerdos", puntualizó ayer el portavoz de la de Servicios Públicos de UGT, Luis Lozano. Dirigentes de UGT, STEPV, CC OO y ANPE denunciaron ayer en conferencia de prensa que "no ha habido una oferta global de negociación del Gobierno de Zaplana para regular la función pública". El Gobierno Valenciano, precisó Vicent Mauri, del STEPV, "no ha hecho ninguna propuesta concreta de incremento retributivo, más que la que viene de Madrid, el 2% del IPC. Es un hecho inaudito en todo el estado español". Mauri añadió que "no se puede desviar una negociación global para diluirla en mesas sectoriales", las cuales tampoco han dado ningún fruto. En concreto, en el área de Educación, el consejero Manuel Tarancón ha estado ausente en más de doce reuniones sectoriales.Según explicó el responsable de la federación de enseñanza ugetista, Gonzalo Castillo, los sindicatos convocantes consideran que hay cinco puntos "incuestionables" en las negociaciones que son "la recuperación del poder adquisitivo de los funcionarios públicos, una oferta pública de empleo para reducir la eventualidad, fondos de ayuda social, la creación de servicios de prevención propios y la reducción de la jornada laboral a 35 horas".

Las movilizaciones se han concentrado en dos fases. Una que comenzará el próximo día 9 y que culminará con la manifestación la tarde del 14-D bajo el lema Por una negociación colectiva y la defensa de los servicios públicos y otra, aún por concretar, que abarcará el primer trimestre del próximo año. De entrada, los días 9, 10 y 13 los sindicatos han preparado un calendario de asambleas, visitas a los centros de trabajo, recorridos en caravanas por las ciudades y sendas ruedas de prensa en Alicante y Castellón. Los paros parciales de 15 minutos comenzarán a las 10:30 de la mañana en todas las consejerías y organismos públicos del Gobierno Valenciano, a las 12.00 horas en los colegios de Primaria y a la hora del recreo en los institutos de Secundaria.

"El objetivo", precisó el responsable de la federación de servicios públicos de CC OO, Xavier Rius, "es forzar al Consell a convocar unos cauces de negociación que permitan satisfacer las necesidades de los empleados públicos". Ruis denunció, además, "la incapacidad de las distintas consejerías de la Administración Valenciana para unificar sus mensajes", que ejemplificó con "el discurso en la mesa sectorial de educación, la propuesta de la mesa general de la función pública y el lamentable discurso del consejero de Administración Pública y Justicia, Serafín Castellano". Así, precisaron, "es muy difícil negociar".

Las movilizaciones propuestas por los cuatro sindicatos, a las que se ha adherido también la Confederación General de Trabajadores (CGT), pretenden, por otra parte, poner un freno a lo que consideran "una campaña de maquillaje" y de "manipulación" por parte de la Generalitat sobre el incremento del capítulo de Personal consigando en los Presupuestos del año que viene. "Existen síntomas de maquillaje de cifras", apuntó Castillo, que aseguró que los números están mal hechos". Una cosa es el incremento del capítulo de Personal debido al aumento de plantillas y otra, bien distinta, que el incremento se refleje en las nóminas, resumió.

Mauri insistió en que "lo que quieren los sindicatos es que haya una negociación real de las retribuciones y se convoque una mesa general de la función pública". De no hacerse, adelantó que "las movilizaciones a partir de enero están servidas". El presidente de ANPE, Antonio Clemente, coincidió con el resto de sindicatos y aseguró que la carta enviada ayer por la Dirección de Personal de Educación a los docentes, desautorizando a los sindicatos, es "una provocación" y "una mala estrategia".

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