Lorca no tiene la culpa

Se ha juntado una panda de gamberros muy serios para ofrecer un homenaje nacional de desagravio a Federico García Lorca. Pero por si acaso alguien piensa que la cosa va de mofa, ellos son los primeros en defenderse: "No nos reímos de Federico, sino con él, que hubiera sido el primero en cabrearse si llega a conocer lo que se ha hecho en su centenario". Quienes lo dicen son conocidos por todos y los responsables de que hoy se estrene en el Teatro Alfil, de Madrid, Tú no tienes la culpa, Federico. Las actrices Gracia y Sole Olayo, más conocidas por Las Veneno; el escritor Moncho Alpuente, que escribió este texto porque se le apareció en sueños cuando comprobó cómo le estaban dando la brasa a Lorca con lo del centenario, y el director Alfonso Ungría, que, a pesar de ser un hombre del mundo del cine, reconoce públicamente que a él esto del teatro le ha ido siempre. Pero aún hay más provocadores en el proyecto: Reverendo con su música y Manu Berástegui con la escenografía y vestuario tres charmant.Aunque Las Veneno reinciden en algunos aspectos de su idiosincrasia, como son los vestidos vaporosos y escotaditos, las presuntas joyas y el maquillaje al peso, dan una vuelta de tuerca a su propio arte y sorprenden con nuevos aires, siempre en su línea lenguaraz y prolálica, contando cómo es imposible hacer coincidir dos palabras que, según Alpuente, se llevan muy mal: "Cultura y ministerio". Cantan, bailan, ofrecen pases de modelo de Grigorio y Sistino, lanzan al mercado lorquiano muñequitos de guardia civil para colgar en el cristal del retrovisor, anuncian películas como Lorca, la ballena asesina, recuerdan el éxito musical del verano con el grupo Ca-lor-ca-lor-ca-lor-ca, se lanzan con el tanguillo de Doñana y, sobre todo, se regodean de las autoridades y dan un repaso a ciertos sectores de la intelectualidad, pero eso sí, salvando a sus incondicionales, como José Luis Sampedro, un auténtico fan de este peculiar grupo, del que dice: "En estos tiempos de frivolidad cultural, en que muchas actividades se conciben y montan de cara al apoyo oficial y siguiendo caminos trillados, causa admiración la independiente trayectoria de este grupo en el que sus actrices son herederas de la comedia ingeniosa y de la revista cómica, siempre con un buen gusto irreprochable".

El escritor Moncho Alpuente explica que su texto "no es un homenaje ni una crítica a lo que se ha hecho con Lorca y se seguirá haciendo sólo un análisis al lorquismo de 2ª, 3ª y 4ª y 5ª categoría..., el de clase extra A es algo muy hermoso". Las chicas le apoyan y añaden: "Lo que más nos gustó de la propuesta de Alpuente es cómo ha retratado a una sociedad que se ha apropiado de la obra de un poeta, manipulándola, tergiversándola, usurpándola..., sólo muestra las barbaridades que se pueden llegar a hacer". Alpuente, que ha seguido de cerca la carrera de estas actrices, lanza un aviso para caminantes: "El humor está muy presente en esta obra, que es muy seria".