La Autoridad del Transporte propone un nuevo túnel para los FGC bajo el paseo de Gràcia

Las líneas de metro 1, 2, 3 y 4, los Ferrocarrils de la Generalitat y los trenes de cercanías disponen de estaciones e intercambios en el centro de Barcelona, en la zona comprendida entre las plazas de Catalunya, Universitat, Urquinaona y la Gran Via. El resultado es muy desigual. Los viajeros realizan algunos transbordos con gran facilidad y otros empleando gran cantidad de tiempo. Para solventarlo, la Autoridad del Transporte (ATM) ha propuesto un nuevo túnel para los Ferrocarrils de la Generalitat bajo el paseo de Gràcia, entre la plaza de Catalunya y Mallorca.

Unas 400.000 personas utilizan diariamente las estaciones ferroviarias centrales, que quedarán interconectadas a partir del 1 de enero, cuando Cercanías se incorpore a la tarifa única. De estas 400.000 personas, 100.000 efectúan un transbordo en estas estaciones, con inversiones de tiempo diversas. En estos momentos, sólo la línea 1 conecta con todas las demás; la línea 2 está conectada, aunque mal, con la 3 y con Renfe; la línea 3 está también mal conectada con la línea 2 y con la 4; es mala también la conexión entre la línea 4 y Cercanías; Ferrocarrils de la Generalitat sólo está bien conectada con la línea 3 del metro y mal con todas las demás.El resultado de todo esto lo relata la ATM: "Recorridos largos y tortuosos, ausencia de imagen común, falta de información conjunta, baja calidad".

La solución propuesta por la ATM es compleja, ya que implica un nuevo túnel, pero no se acaba ahí, sino que exige la apertura de nuevas vías de transbordo entre las diferentes estaciones.

El túnel partiría de donde hoy terminan los Ferrocarrils de la Generalitat en la plaza de Catalunya. Allí llegan las líneas procedentes de Sabadell y Terrassa, Sarrià y Sant Gervasi, lo que supone un notable saturación de las vías que discurren bajo la calle de Balmes y que, además, soportan ida y vuelta. El nuevo túnel, con sólo dos vías, permitiría que una parte de los trenes no retornaran por Balmes, sino que cruzaran la plaza de Catalunya y subieran hasta Mallorca por debajo del paseo de Gràcia para enlazar luego con el ramal ya existente en la estación de Provença. La longitud de este nuevo túnel sería de unos dos kilómetros.

En este lazo se instalaría al menos una nueva estación de intercambio, entre la ronda de la Universitat y la Gran Via, que permitiría el transbordo entre los FGC y las líneas 3 y 4 del metro, facilitando también el intercambio con la línea 2 (situada bajo la Gran Via), la 1 y los trenes de Cercanías de Renfe que paran en la plaza de Catalunya.

El trazado admitiría también un enlace en la confluencia de Aragó y paseo de Gràcia, pensado por si, definitivamente, circula por ese punto el tren de alta velocidad, opción que prefiere el Ministerio de Fomento, aunque no cuenta con la aprobación municipal.

El estudio de la Autoridad del Transporte señala que con todos estos intercambios en funcionamiento se produciría un ahorro de 1,5 millones de horas anuales, contando con que no hubiera aumento de usuarios y se mantuviera la cifra de viajeros que actualmente utiliza el servicio.

La ATM sugiere también una "Rambla del Transporte". Se trata de un paseo de 200 metros de longitud que discurriría bajo el paseo de Gràcia, en la zona comprendida entre la Gran Via y la ronda de la Universitat, y sobre el primero de los túneles de esta vía, el utilizado por los trenes de las líneas 3 y 4. Esta rambla tendría una extensión total de 5.000 metros cuadrados, estaría iluminada por luz cenital y se destinaría a usos comerciales.

Los estudios realizados indican que la superficie del paseo de Gràcia se halla situada en una cota de 21 metros sobre el nivel del mar. La soterrada Rambla del Transporte se situaría en una cota inferior, pero a 15 metros; el primer túnel del metro se halla a 8,40 metros y el segundo a 3,40 metros, en todos los casos sobre el nivel del mar. El que se construiría para Ferrocarrils de la Generalitat estaría a ocho metros por debajo del nivel del mar y a 29 de la calzada del paseo de Gràcia.

El coste estimado de toda la operación es de 17.500 millones de pesetas y el plazo de construcción oscila entre dos y tres años.

Un miembro de la Autoridad del Transporte explicó ayer que el proyecto, realizado por la consultoría BB & J, aunque tiene carácter oficial, no es en sentido estricto una propuesta definitiva. Se trata, explicó, de un plan que está aún muy verde y que tiene que ser analizado, evaluado y aprobado por el Consejo de Administración de la ATM.

La Autoridad del Transporte tiene prevista una reunión para el próximo lunes, aunque probablemente no discutirá este proyecto y se centrará casi exclusivamente en el trazado del tranvía entre Francesc Macià y el Baix Llobregat. Las empresas que optan a la concesión han pedido un aplazamiento de un mes, que seguramente admitirá la ATM.