El campus gaditano se extiende a ambos lados del Estrecho de Gibraltar

El ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, acogió ayer con agrado la propuesta presentada por el alcalde de Algeciras, el andalucista Patricio González, en relación a la creación del Aula Universitaria del Estrecho. González se desplazó ayer hasta Convent Place, la sede del Gobierno gibraltareño, para mostrar al mandatario de la colonia británica este proyecto que, bajo el auspicio de la Universidad de Cádiz (UCA), pretende unir ambas orillas del Estrecho acogiendo a alumnos de Marruecos, Gibraltar y España. En el Aula del Estrecho se desarrollarán diferentes actividades en las que participarán alumnos de las comunidades marroquí, gibraltareña y principalmente gaditana. Se impartirán clases para obtener títulos propios de la Universidad de Cádiz y estudios de posgrado; títulos de expertos, especialistas y masters universitarios, seminarios, foros de debate, conferencias y cátedras temáticas. Algunos de estos estudios estarán relacionados con temas portuarios

Para la organización y puesta en marcha del Aula del Estrecho se prevé la inminente creación de una comisión directora compuesta por el rector y tres vicerrectores de la Universidad de Cádiz, el alcalde de Algeciras y tres responsables de la Escuela de Estudios Universitarios, así como dos representantes de Marruecos y Gibraltar, pudiéndose incluir como asesores a empresarios e industriales de la zona.

Se pretende que esta aula tenga sedes en Tánger, Algeciras y Gibraltar. La Universidad de Cádiz apoya este proyecto porque cree que hay que hacer "un esfuerzo conjunto de cooperación, de diálogo y mutua ayuda que estimule las relaciones entre las sociedades que conviven en un espacio reducido, unidos y a su vez separados por el estrecho de Gibraltar".

Tras la reunión, Patricio González manifestó que "todas las partes están de acuerdo en la necesidad de profundizar en la creación de este aula, a través de una entrevista que posiblemente se celebre en Cádiz próximamente". González destacó la receptividad del ministro principal de Gibraltar, a pesar de que éste no quiso hacer ninguna declaración.