Aprovechar la oportunidad

Después de inciertas negociaciones culminadas tras 13 años de esfuerzos, Pekín y Washington han llegado a un acuerdo para la incorporación de China a la Organización Mundial de Comercio (OMC). Aunque los detalles del acuerdo son todavía escasos, las noticias proporcionan un gran empuje psicológico a las perspectivas del comercio mundial y comportan profundas implicaciones políticas para la futura participación de Pekín en asuntos internacionales.El acuerdo es una victoria de los reformistas chinos liderados por el primer ministro, Zhu Rongji, y apoyados por el presidente, Jiang Zemin. (...).

Esto dará a China renovadas influencias cuando se reúnan los ministros de la OMC, dentro de dos semanas, en Seattle, aunque no sea miembro oficial hasta que la UE y otros países sellen sus propios acuerdos. El progreso, sin embargo, tiene su precio, y por eso hay voces críticas en China. Aquí, la incorporación ha sido recibida con una mezcla de sentimientos e incertidumbres. No hay escapatoria a la pérdida de puestos de trabajo debido a la inevitable muerte de las improductivas industrias estatales y a la obligada apertura de otras que compitan con las extranjeras.

Aparte de eso, el miedo a la extensión del malestar en las ciudades y la inestabilidad política explican en gran parte las reticencias pasadas en hacer concesiones a cambio de lo que sería un paso gigantesco en la consolidación del país como miembro de pleno derecho del mercado mundial. (...) El país necesita desesperadamente inyecciones de tecnología y capital extranjeros.

Hong Kong, 16 de noviembre.