Pluja d"estreles
Vamos a tener butacas de primera fila para la lluvia de estreles fugisseres o errants de esta noche de Santa Isabel, cuñada de Jaume I. La pluja d"estreles dels Leònids, producida al atravesar la Tierra el enjambre de meteoritos dejado por el cometa 55P/Tempel-Tuttle. Hoy acude a su cita de cada año, pero cada 33 describe una órbita alrededor del Sol y su estela es más compacta; el azul planeta traspasa la región donde están más concentrados los residuos del cuerpo celeste y la lluvia es más espectacular. Excepcional fue en 1933, 1966 y debería serlo esta misma madrugada, a partir de las tres.No constituyen ningún peligro para las personas; se desintegran antes de llegar a la superficie. Con un solo milímetro, a 71 kilómetros por segundo, la energía que liberan, al chocar contra el aire, crea una esfera de plasma de un metro de diámetro. El plasma es un estado de la materia en el que los átomos tienen tanta energía que emiten luz. Esta esfera es lo que vemos desde la Tierra y llamamos estrella fugaz.
Nuestro pueblo ha considerado benéficos estos descensos estelares del sagrado cielo: el que cau del cel no fa mal de los juegos infantiles. Al ver caer una estrella se aconsejaba decir: "Déu el guie" para evitar la muerte de un familiar. Se creía que su dirección auguraba el rumbo de los vientos y que eran almas hacia el otro mundo, participando de una creencia universal que convertía las estrellas en animetes. Se aconsejaba, ante la estrela fugissera, pedir tres deseos, pues, al menos, concede uno. Si una mujer se toca los cabellos, le crecerán y, si se pasa la mano por la cara, aumenta su belleza y, al contar nueve cadas, se soñará con el futuro amante. Son restos del antiquísimo culto a las estrellas, a las que se saluda, se les descifran auspicios y se les piden dones como divinidad propicia y fecundante.
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