Protección de Datos expedienta a Telefónica por pedir de forma confusa a sus clientes el uso de sus datos

La Agencia de Protección de Datos considera que Telefónica no ha informado adecuadamente a sus clientes a la hora de pedirles autorización para tratar sus datos personales con fines publicitarios. Este hecho ha provocado la apertura de un expediente que enfrenta a la empresa a una sanción máxima de 50 millones de pesetas. El origen del procedimiento sancionador está en cinco denuncias de clientes de Telefónica, explicó el adjunto al director de la Agencia de Protección de Datos, Jesús Rubí. Éstos, como el millón y medio de nuevos abonados que contrataron algún servicio con esta empresa desde septiembre de 1998, recibieron hace un mes una carta de Telefónica en la que solicita autorización expresa para utilizar sus datos personales, tal y como exige la ley. Pero en esas cartas, redactadas de forma confusa, Telefónica olvidó recordar a sus clientes que tenían un mes para contestar a un apartado de correos si no deseaban que todos los datos que pueden desprenderse de la factura telefónica -desde el nombre y la dirección hasta el gasto mensual- fueran tratados. La misiva tampoco precisaba qué datos eran ésos y si iban a ser empleados sólo por Telefónica de España o por otras empresas del grupo.

La agencia considera que estas cartas no dan a los usuarios "información suficiente" para que éstos puedan ejercer su derecho a que Telefónica no recoja, grabe, conserve, elabore, modifique, ceda, bloquee o cancele sus datos. Y no sólo incurren en este error las comunicaciones enviadas a los nuevos abonados. También las que tuvieron lugar en la primera oleada, efectuada el año pasado para cumplir con el reglamento que obliga a todos los operadores de telefonía a solicitar el "consentimiento informado" de los usuarios para emplear sus datos.

El director de la agencia, Juan Manuel Fernández López, tiene seis meses para resolver el expediente, al que se incorporarán las alegaciones de Telefónica. Mientras tanto la empresa podrá usar los datos de sus clientes que expresamente no se han negado a ello, porque la agencia no ha adoptado ninguna medida cautelar en este sentido ni prevé hacerlo por el momento.

De constatarse la irregularidad, se trataría de una falta grave que acarrea sanciones de entre 10 y 50 millones de pesetas. Telefónica obtuvo 217.584 millones de beneficios, según la memoria anual de 1998.