Los partidos de la oposición imponen a CiU un debate para la reforma urgente de la televisión

Primer problema para Jordi Pujol. Antes de conseguir la investidura como presidente de la Generalitat, los cuatro partidos que, de momento, se configuran como integrantes de la oposición en Cataluña se pusieron de acuerdo ayer para impulsar la reforma de la radiotelevisión pública catalana. Los grupos parlamentarios de PSC-Ciutadans pel Canvi, Partido Popular (PP), Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa-Verds (IC-V) presentaron ayer por la tarde una petición para que el Parlamento catalán celebre antes de fin de año un debate sobre la situación de los medios de comunicación audiovisuales de la Generalitat. El objetivo es conseguir que estos medios dejen de depender del Gobierno.

La propuesta de celebrar un debate monográfico sobre la reforma del sistema autonómico de medios audiovisuales fue lanzada por Pasqual Maragall la semana pasada como una de las primeras iniciativas para poner en práctica desde la oposición el programa que había preparado para aplicar desde el Gobierno de la Generalitat. Lo que él definió como "etapa de pregobierno" antes de ganar las próximas elecciones autonómicas.El apoyo de ERC, el PP e IC-Verds a esta propuesta es coherente con lo que han defendido durante la campaña electoral. Pero ayer constituyó una sorpresa para los socialistas ver como los dos partidos que Jordi Pujol pretende convertir en sostén para su investidura como presidente de la Generalitat, el PP y ERC, se sumaban a una iniciativa que, si prospera, puede afectar a una de las bases sobre las que CiU y Pujol han basado su poder en Cataluña en los últimos 15 años.

La reforma de la radiotelevisión catalana fue planteada hace cuatro años, al inicio de la anterior legislatura, por estos mismos cuatro partidos. Pero CiU consiguió desbaratar aquel intento lanzando una fuerte campaña contra ERC, entonces dirigida por Àngel Colom, por aliarse en este objetivo con el PP de Aleix Vidal-Quadras.

Ahora, Pujol quiere lograr la investidura como presidente de la Generalitat y la estabilidad parlamentaria de un gobierno minoritario con el apoyo alternativo de PP y ERC. Pero la firma puesta por estos dos partidos a la propuesta de debate sobre la radiotelevisión pública indica que ambos quieren marcar distancias y hacer valer el voto de sus diputados.

Investidura

El presidente del Parlamento catalán, Joan Rigol, recibirá hoy a Pujol en el turno de consultas que ha celebrado para encargar la formación de gobierno. Pujol será el que recibirá el encargo, porque es el candidato del grupo con mayor número de escaños, pero no tiene asegurado aún el apoyo de ningún otro grupo.Maragall, que es el líder del segundo grupo, expuso ayer por la tarde a Rigol su posición. "Va a haber un gobierno de continuidad, con el apoyo de CiU y PP, pero yo lo veo muy inestable", manifestó tras la entrevista.

En su búsqueda de apoyos para la investidura, Pujol se reunirá esta tarde con el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod. En el consejo nacional del pasado domingo, los dirigentes de Convergència Democràtica (CDC) reclamaron a Pujol un esfuerzo para obtener el apoyo de los independentistas y desmarcarse así del PP en Cataluña.

La cúpula de CiU se ha propuesto conseguir la abstención de ERC en la investidura de Pujol para romper el empate técnico entre el bloque conservador -CiU y el PP- y el progresista -PSC, ERC e IC- que se evidenció en la constitución del Parlamento, el pasado viernes. Para ello, CiU sigue contando con que tendrá el apoyo del PP en la investidura, como ayer se encargó de recordar el secretario general de CDC, Pere Esteve, en declaraciones a TVE.

Tanto Esteve como el líder de Unió Democràtica, Josep Antoni Duran, subrayaron que les será muy difícil suscribir un pacto estable con los independentistas antes de las próximas elecciones generales. "No nos engañemos, de aquí al lunes, cuando comienza el debate de investidura, CiU y ERC no se pueden poner de acuerdo sobre un programa de gobierno", afirmó Duran..

Los dirigentes de ERC han acogido con gran escepticismo las ofertas de colaboración nacionalista que han lanzado en los últimos días los líderes de CiU y consideran que responde sólo a una estrategia de propaganda para no aparecer asociados al PP. Carod denunció ayer una "ofensiva mediática" para forzar un acercamiento entre CiU y ERC cuando, en realidad, la coalición de Pujol ya ha optado por el PP. "CiU y el PP sienten un amor incómodo, pero son un perfecto matrimonio de conveniencia", aseguró Carod tras entrevistarse con Rigol.

El líder del PP, Alberto Fernández Díaz, reiteró que su partido no ha decidido aún el sentido de su voto. Pero añadió que si CiU se acaba decantando por ERC está preparado para desarrollar una "oposición franca".