EL SUEÑO DE UN PEINADO

La Pasarela L"Oréal 99 reunió, en el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid, un laborioso y complejo cast de éxito que superaba las cien modelos. El desfile fue un maratón de más de dos horas. Entre las top destacaron Laura Ponte, que desfiló para Kina Fernández; Nieves Álvarez, en negro evanescente, para Miguel Palacio; una sofisticada y teatral Antonia dell"Atte, para Andrea Morros; Verónica Blume, para Amaya Arzuaga, y Adriana Karembeu, para Felipe Varela. Los peluqueros convocados por la firma cosmética dieron rienda suelta a su imaginación, algunos con mejor fortuna que otros (a Enrique Llongueras le falló ocasionalmente el antifaz-velo de cabellos lacados, Loida hizo un bello ejercicio de poesía en movimiento y Tono San Martín desplegó un arsenal escultórico). La ropa tuvo también su protagonismo: Antonio Miró invirtió los papeles: los chicos, con la ropa de las chicas, y viceversa; Roberto Torretta trajo la piel blanca de cantos vivos; Joaquim Verdú dio un recital de neoarrugas; Jota más Ge se apuntó al hippy chic, y Hannibal Laguna mezcló la nocturnidad alicantina con la alevosa influencia de Mugler.- ,