La coreógrafa Carmen Werner llena de tensión "Irreverente quietud" La compañía madrileña Provisional Danza presenta su último montaje en Barakaldo

La compañía madrileña Provisonal Danza, creada en 1987, presenta hoy en el Teatro Barakaldo (20 horas) la obra Irreverente quietud, en la que ocho bailarines sacan al escenario los aspectos más oscuros de la vida. La coreógrafa Carmen Werner, autora y directora del montaje, ha querido mostrar situaciones extremas, entre lo opresivo y lo alucinante, con un estilo cargado de tensión que "no deja un momento de calma al espectador".

Carmen Werner fue fundadora de Provisonal Danza, compañía con la que ha presentado sus trabajos en festivales de todo el mundo. Irreverente quietud sigue una línea de continuidad de las anteriores coreografías del grupo. Como en Rincón de lobos o Coraje, escena 13, el espectáculo se vuelve a centrar en las caras más turbias de la existencia y en la capacidad humana para sobrevivir a ellos."Siempre ha existido un determinado tipo de persona caracterizada por su forma de pasar por la vida como si nada le importara, absorta del resto de la humanidad", dice Werner al explicar el contenido de su obra. "La denominación adecuada sería independiente, a veces irreverente, por la quietud con la que se manifiesta. Quietud en este caso como sinónimo de aguante, al menos en apariencia. No es estar quieto por pasividad sino por necesidad".

Werner ha dirigido el trabajo de los ocho bailarines que danzan al ritmo de música de Arvo Pärt, Gustav Mahler y Vivaldi, y de la compuesta para el espectáculo por Pedro Navarrete. En el inquietante espectáculo que propone juega un destacado papel el uso de la iluminación, diseñado por el responsable del espacio escénico Carlos Marquerie.

Tras la presentación de la obra el pasado mes de diciembre en Madrid, la crítica destacó la calidad de la interpretación de los bailarines y la expresividad y el dramatismo reservado para el final, después de un espectáculo triste, cargado de obsesiones tenebrosas, carentes de humor o sensualidad.

Mientras Provisional Danza actúa en Barakaldo, en el Teatro Arriaga de Bilbao los Ballets de Montecarlo ponen hoy en escena la última representación de La Cenicienta, con música de Serge Prokofiev. La originalidad del montaje radica en huir de las dulzonas versiones al estilo Disney, y haber cargado a los personajes del cuento de hadas de una dimensión más humana. La obra se estrenó en la Ópera de Montecarlo el pasado mes de abril, con una escenografía a medio camino entre lo real y lo fantasmagórico.