La revolución del comercio electrónico llega al sector automovilístico

La casa Vauxhall, filial británica del Grupo Opel, inaugura esta semana una nueva fórmula de venta directa de automóviles. Aprovechando las ventajas de la revolución del comercio electrónico, la venta por Internet, la empresa automovilista ofrece a sus clientes descuentos colosales en marcas populares como Corsa y Vectra. Esta alternativa al camino tradicional garantiza una reducción del precio total del coche en torno a las 1.000 libras (unas 250.000 pesetas). Vauxhall tramita la orden de compra recibida por Internet y gestiona con el concesionario más próximo al domicilio del comprador la entrega del automóvil. El plazo de entrega se calcula en unas tres semanas.

La iniciativa de Vauxhall, anunciada el pasado jueves, fue inmediatamente contestada por otro proveedor de servicios en línea. Totalise inauguró ese mismo día una página web con ofertas de automóviles importados a precios de ganga. Este proveedor garantiza en su sede informática, bautizada Carvase, el Peugeot 406 con un descuento de 5.000 libras (más de 1.200.000 pesetas) respecto al precio habitual. El Ford Focus sale en Internet con un ahorro de 3.000 libras (cerca de 800.000 pesetas).

La guerra de precios no ha hecho más que comenzar. En la Feria del Motor, prevista en Londres la semana próxima, Vauxhall anunciará la gama de descuentos que introducirá en seis ediciones limitadas de sus marcas más populares.

Los amplios descuentos en la venta por Internet de automóviles son posibles dado el ahorro que las diferentes empresas efectuarán en promoción y distribución. La llegada al Reino Unido de esta nueva fórmula beneficia al consumidor que paga los precios más elevados por vehículos nuevos de toda la Unión Europea, de acuerdo con un estudio comparativo reciente. En algunos modelos, los márgenes superan el 30%. La Comisión de la Competencia tiene en marcha una investigación del sector y se espera que su informe, previsto en unos dos meses, denuncie actuaciones anticompetitivas, así como el abuso extendido de los precios fijos.

Abrir vías alternativas, como Internet, es la última estrategia de defensa cara a la publicación del informe oficial. Además del servicio de adquisición de coches nuevos, Vauxhall ofrece al cliente la posibilidad de vender por Internet su vehículo viejo y le facilita la financiación necesaria para completar la transacción.

"Internet puede ser una herramienta de ayuda a la red tradicional de venta y distribución", defiende Garel Rhys, profesor de la Business School de Cardiff, Gales. "En vez de presentar una amenaza a los concesionarios, Vauxhall demuestra que utilizando Internet puede mejorar la forma en que se entrega un vehículo a los clientes".