La capital bávara de La Marina

Después de entrar en una cervecería y de -para sacudirse la "sensación espesa" que deja la cerveza- contemplar las obras del pintor alemán Lucas Cranach, Josep Pla resumía en tres conceptos aquello en lo que le hacía pensar la ciudad de Múnich: "Contradicción básica, extremos y falta de mesura".Algo parecido a lo que pensaba Pla de Múnich se le puede pasar por la cabeza a quien entre en esa gigantesca cervecería que es la carpa donde desde el pasado viernes el Carnaval Club Calpe celebra la Gran Fiesta de la Cerveza. No en vano, durante el certamen, que este año llega a su 12º edición, Calpe se convierte en la capital bávara de la Marina Alta.

Aquí a nadie parece sorprenderle que la Fiesta de la Cerveza se sume a la celebración del Nou d"Octubre y exalte ese día lo más pintoresco de la cultura valenciana, la paella. De hecho, la Fiesta de la Cerveza, que surgió en Múnich en 1810, se declina en la localidad alicantina con porciones de paella y vino tinto que se sirve con hielo.

Está claro que los puristas de uno y otro signo podrían pensar que en la liturgia de la Oktober Fest es una herejía introducir el vino, aunque sólo sea para las señoras como advierte el programa, o que festejar la diada con un plato de paella y mucha cerveza es dejarse arrastrar por los tópicos. Por si fuera poco, Günter Jahn, vicepresidente del Carnaval Club Calpe, desvela otra particularidad de estas Fiesta de la Cerveza: "De siete a doce de la noche vienen los alemanes, y, cuando estos se van, llegan los españoles". Es decir, que la medianoche marca el relevo entre el público tradicional y el público curioso. Sobre esta cuestión Pla decía que "las cervecerías se deben visitar a las seis de la tarde que es la hora de máxima animación".

En otras palabras, que la lejana Múnich y su eventual trasunto en la Marina Alta profesan el mismo culto por la cerveza y comparten ese "principio de contradicción" al que se refiere Pla. En Calpe, evidentemente, no se pueden contemplar las obras de Lucas Cranach, pero, por muy numerosa que sea la colonia de residentes alemanes, ya parece bastante "arbitrario" -por utilizar otro de los adjetivos con los que Pla describe Múnich- que por estos pagos se celebre, como asegura Günter Jahn, una de las Fiestas de la Cerveza más importantes de cuantas tienen lugar fuera de Alemania. Sea como fuere, la Gran Fiesta de la Cerveza de Calpe hace tiempo que dejó de ser una anécdota.

El vicepresidente del Carnaval Club Calpe aseveró que durante la Gran Fiesta de la Cerceza de este año pasarán por la carpa, que instalan junto al Polideportivo, más de 15.000 visitantes. Y sólo las personas invitadas por la organización que provienen de países como Alemania, Suiza y Holanda, llegan, según Günter Jahn, al medio millar.

Tanta es la multitud que la cerveza corre a raudales. El vicepresidente del Carnaval Club Calpe anticipa que este año se consumirán unos 200 barriles de esta bebida, lo que viene a representar unos 100 hectólitros. "Los conductores", puntualiza el programa, "pueden brindar con toda tranquilidad, ya que disponemos de cerveza sin alcohol".