Arenas plantea al PP vasco que sea la alternativa al nacionalismo

El secretario general del PP, Javier Arenas, abrió ayer el IX Congreso Regional del PP del País Vasco, al que asistió también el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, con un discurso en el que pidió a los compromisarios y a la dirección entrante que avancen hacia la centralidad política con el objetivo de copar el espacio que a su juicio ha dejado libre el PNV al alinearse con los firmantes de Lizarra. "Tenemos que convertirnos en la alternativa de lo que ha supuesto el PNV todos estos años en el panorama político vasco", declaró.El congreso no ha supuesto un cambio significativo de línea política, ni de personas, ya que los populares mantienen al frente del partido a Carlos Iturgaiz, que recibió el 96% de los votos. La cita congresual transcurrió en medio de la unanimidad de sus compromisarios, que dieron su aprobación sin voces críticas tanto la gestión del equipo saliente como a las ponencias políticas y de juventud.

Arenas precedió en el uso de la palabra al alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, una de las figuras emergentes del partido, que en la nueva ejecutiva ocupará una vicepresidencia. "Tenemos que salir de aquí convencidos", declaró Arenas, "de que el partido está preparado para ser la alternativa de gobierno clara [en el País Vasco]".

Mensaje en positivo

En similares términos se expresó Alfonso Alonso, para quien el PP debe afrontar con ambición los próximos años y con un mensaje en positivo que "nos permita liderar la política vasca". Alonso, que la pasada semana se entrevistó con el presidente del Gobierno José María Aznar, es considerado por algunos de los barones del PP vasco como el sustituto natural de Carlos Iturgaiz, con quien mantiene una excelente relación, en un futuro próximo.Los portavoces populares en los ayuntamientos de San Sebastián y Bilbao, María San Gil y Alberto Basagoiti, también dispondrán de una vicepresidencia en el nuevo esquema directivo del PP vasco, que mantiene a Carmelo Barrio como secretario general sin ninguna oposición.