La defensa aérea de España pasa a depender del mando de la OTAN en Nápoles

La dirección de la defensa aérea del territorio español ha pasado a depender del Mando Componente Aéreo de la Región Sur de la OTAN, con sede en Nápoles (Italia), tras la integración de España en la nueva estructura militar aliada. El Centro de Operaciones Aéreas Combinadas (CAOC), de Torrejón de Ardoz (Madrid), ha quedado enlazado con la base aérea de Vicenza (Italia), bajo la autoridad del teniente general estadounidense Michael Short.

La defensa aérea es, según los expertos, "única e indivisible" y por eso en ningún otro campo se produce un grado tan alto de integración. La información registrada por los radares del Ejército del Aire español -por ejemplo, en Canarias- deberá transmitirse, en tiempo real, al CAOC de Vicenza a través del recién activado centro de Torrejón, que recibe el número 8 en la red aliada. El jefe del CAOC de Torrejón es el teniente general Jerónimo Dominguez Palacín, quien ostenta un doble sombrero -aliado y nacional- y, en su segunda condición, dirige el Mando Aéreo de Combate. Aunque la responsabilidad última de la defensa aérea de España corresponde a Nápoles, la mayor parte de las funciones se seguirán realizando por delegación, en tiempo de paz, desde la base de Torrejón.El teniente general estadounidense Michael Short, quien dirigió los bombardeos sobre Yugoslavia desde el CAOC de Vicenza, es el jefe del mando aéreo de la Región Sur, que abarca todo el Mediterráneo. A su Estado Mayor se acaba de incorporar, como director de la división de Planes, el general de brigada español José García de la Vega.

Está previsto construir, a partir del año 2000, un nuevo centro de mando en Torrejón, mucho más potente que el actual. Su coste asciende a 6.656 millones de pesetas, que serán sufragados con cargo a los fondos comunes de la OTAN. Las obras comenzarán cuando esté operativo el centro de mando alternativo de Zaragoza, que duplica al de Torrejón, a menor escala, y ha sido financiado por el Ejército del Aire.

Además, España disputa a Turquía el futuro puesto de mando desplegable de la OTAN. Su embrión sería el Grupo Móvil de Control Aéreo (Grumoca), con base en Morón (Sevilla), que se encargó, entre otras misiones, de la seguridad aérea en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992.