Mazón exige al Consell y Bancaixa que expliquen la operación de hipoteca del Casino de La Vila

El concurso y la adjudicación del Casino de La Vila Joiosa a la empresa Casinos del Mediterráneo y la operación de hipoteca del edificio exigen una explicación del Consell y de Bancaixa. Así lo manifestó ayer Miguel Mazón, miembro del consejo de administración de RTVV por el PSPV y responsable de las cuestiones relacionadas con el juego en el último Gobierno socialista de la Generalitat. Mazón, que criticó la gestión del PP en la adjudicación del casino, mostró su estupor por el hecho de que Bancaixa aceptara la constitución de una hipoteca 20 días antes de que el edificio del casino fuera escriturado a favor del adjudicatario de las instalaciones y pregunta si el Consell autorizó la operación.

Como secretario de la Consejería de Hacienda, Mazón era responsable de la Comisión Técnica del Juego cuando surgió la crisis del Casino Costa Blanca. En 1995, antes de que los socialistas fueran desalojados del Consell por el PP, y tras fracasar un intento de adjudicación del casino, Mazón decidió constituir una hipoteca a favor de la Generalitat, para garantizar así el cobro de la deuda -entonces de algo menos de 900 millones- que el anterior dueño tenía con la Administración. "Pero el PP lo deshizo todo", dijo ayer Mazón, "convocó una subasta, pero el día antes la anuló e intervino el casino". La intervención tenía por objeto garantizar el cobro de la deuda y que los trabajadores siguieran percibiendo sus salarios. Pero, según Mazón, fue "un fracaso", porque la deuda acabó superando los 2.000 millones. "Entonces optaron por convocar un doble concurso, con requisitos leoninos para evitar la concurrencia", asegura Mazón. El casino fue adjudicado el 13 de abril a la sociedad Casinos del Mediterráneo, que preside Jesús Álamo, empresario dedicado a la fabricación y distribución de máquinas tragaperras. El tipo de licitación era de 2.317 millones. La adjudicación apareció publicada el 29 de abril en el DOGV. En el Registro de la Propiedad de La Vila Joiosa consta que Casinos del Mediterráneo formalizó la compraventa de las dos fincas del casino el 20 de mayo. Pero también aparecen dos hipotecas sobre estas fincas a favor de Bancaixa, por valor de 2.000 millones de pesetas, formalizadas el 30 de abril. Según el reglamento de casinos, la constitución de "cargas reales de cualquier naturaleza sobre los inmuebles en los que se asienta el casino" requiere la autorización de la Comisión del Juego. Este organismo de la Generalitat recibió la solicitud de autorización el pasado día 23. Mazón considera que con la adjudicación la Generalitat ha perdido la posibilidad de garantizarse el cobro de futuras deudas, exige al Consell una explicación, que hace extensiva a Bancaixa por la operación de hipoteca, y muestra su sospecha de que existió presión política a la caja. El vicepresidente primero del Consell, José Luis Olivas, dijo ayer no conocer estas cuestiones, a pesar de que en el momento de la adjudicación era consejero de Hacienda. "Desconozco cuándo y cómo se solicitó esa hipoteca, desconozco las fuentes de financiación de la empresa del casino", afirmó Olivas, quien dijo no saber si la operación fue autorizada por la Comisión del Juego. El asunto fue explicado ayer por el director general de Bancaixa, Fernando García Checa, en el consejo de administración de la entidad. Bancaixa concedió inicialmente la hipoteca con la garantía de las sociedades personales de Álamo, con el compromiso de sustituirlas por el casino después de la adjudicación. El presidente del comité de empresa del casino, Jesús Navarro, restó importancia a la forma en que se concedió el crédito, informa Jaime Esquembre. Según Navarro, el negocio "estaba abocado al cierre". "Ahora se han salvado la actividad y los puestos de trabajo, que era lo importante".