Barberá suspende el trámite para conceder la licencia al polémico hotel de Jesuitas

La tramitación de la licencia solicitada para construir un hotel en el polémico solar de Jesuitas de Valencia fue suspendida ayer por la comisión municipal de Urbanismo. La decisión, que se produce después de que la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat desautorizara el proyecto por considerar que "plantea una propuesta arquitectónica acultural, formalmente banal y materialmente incoherente", pretende evitar que la empresa promotora de la obra, Grand Hotel Crystal Palace,SA, obtenga licencia de construcción por silencio administrativo.

Con la decisión adoptada ayer por el equipo municipal de gobierno que dirige Rita Barberá, se paraliza toda la tramitación relativa al polémico solar. El informe de la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat -cuyo contenido se conocía desde el pasado mes de julio, pero que no fue firmado hasta principios de este mes, debido a los cambios registrados en el Consell tras las elecciones autonómicas, que supusieron el relevo de la anterior titular del departamento, Carmen Pérez, por Consuelo Ciscar- ha sido definitivo. Era el arma que el Ayuntamiento necesitaba para frenar un proyecto al que desde el principio puso objeciones, sobre todo desde el punto de vista estético. La alcaldesa criticó desde el primer momento el "cubo de cristal" presentado para albergar el hotel. El informe de Patrimonio también incidía en cuestiones estéticas, pero ponía igualmente de relieve que el proyecto presentado "incumple los parámetros de ocupación de parcela, superficie edificable, altura máxima de cornisa, volumen edificable y número de plantas", además de vulnerar los "parámetros de economía volumétrica". Ahora la pelota vuelve a estar en el tejado de la Consejería de Cultura y el promotor del hotel, el empresario Antoni Mestre, deberá negociar un nuevo proyecto para el controvertido solar. Así lo manifestó ayer el concejal delegado de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, Miquel Domínguez, quien señaló que la decisión adoptada por la comisión pretende evitar que la promotora de la obra obtenga licencia de construcción por la vía del silencio administrativo. La decisión municipal fue recibida ayer con esperanza por la coordinadora Salvem el Botànic. "Por fin el Ayuntamiento, por voluntad de la alcaldesa, cambia de actitud y se distancia del promotor hotelero apresurándose a colaborar con la consejería para que pueda actuar según sus obligaciones y potestades patrimoniales", señala un comunicado emitido ayer por el citado colectivo, que durante los últimos años ha nucleado el movimiento ciudadano contrario a la construcción de cualquier edificio en el solar de Jesuitas. Salvem el Botànic pide que "no se malbarate esta oportunidad" y espera que la nueva directora general de Patrimonio, con el apoyo de la alcaldesa y "libre de la presión de la fontanería municipal y de la reyna provincial", aplique correctamente la nueva Ley de Patrimonio Cultural Valenciano, que le "otorga toda la autoridad necesaria para resolver de acuerdo con el rechazo que despierta cualquier proyecto de edificación" en el solar de Jesuitas.