Organizaciones sociales acusan a la Generalitat de inflar los datos de ayudas a inmigrantes
La Generalitat ha publicado un informe que cifra en 42.338 millones de pesetas las ayudas destinadas a inmigrantes entre 1993 y 1998. Una de las partidas más importantes (15.123 millones) del plan interdepartamental, cuyo objetivo es la integración social del colectivo, es la dedicada al millar de presos extranjeros, sin distinción de origen, que hay en Cataluña. Bienestar Social, que preside la Comisión de Inmigración, ha inflado algunas subvenciones al no distinguir el origen de los destinatarios. La Federación de Colectivos de Inmigrantes y otras entidades acusan al consejero Antoni Comas de "falsear" datos y advierten del peligro de "enfrentamiento social" que puede suponer difundir una imagen de ayudas supuestamente generosas.
La Federación de Colectivos de Inmigrantes de Cataluña (FCIC) y varias organizaciones de ayuda al inmigrante, como CITE-CC OO, SOS Racismo y Amic-UGT, aseguran que los números elaborados por Bienestar Social son humo. De entrada, estas entidades recuerdan que la Generalitat no tiene un presupuesto específico para inmigración. "Aquí lo que se ha hecho es rascar de aquí y de allá gastos que puedan sonar a extranjeros", explica Miguel Pajares, presidente de CITE-CC OO. David Cárceles, portavoz de SOS Racismo, abunda: "Falta una política global que tenga en cuenta factores de marginalidad que eviten hechos como los de Terrassa o Banyoles". Perplejidad Las entidades están perplejas por el hecho de que la Generalitat haya incluido en el plan el gasto penitenciario de los extranjeros, ya que consideran que esa cuestión no tiene nada que ver con una acción especial para la integración de los inmigrantes. Y más cuando el propio subdirector general de Servicios Penitenciario, Armand Calderó, reconoce que los 15.123 millones de esta partida (el 35% del coste global del plan interdepartamental) engloban a los presos de países de la Unión Europea, entre los que hay italianos (56), portugueses (40), franceses (35) y británicos (27). Calderó lo justifica alegando que "la integración también debe incluir a los súbditos europeos", pero admite: "Es cierto que no hacemos programas específicos para inmigrantes". El informe sobre el desarrollo del plan de inmigración de la Generalitat suma subvenciones destinadas a personas con necesidades sociales en general como si fueran ayudas exclusivas para inmigrantes. Es también el caso del dinero para ayudas de comedor escolar (3.327 millones desde 1993) y, según Teresa Núñez, de la Federación de Enseñanza de CC OO, de las destinadas a la compra de libros de texto (113 millones). PASA A LA PÁGINA 9
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