Golpes nocturnos en el 'green'
Golpes de día y golpes de noche. "Por el día se ejercitan los deportistas y por la noche los ladrones", decía ayer un trabajador del campo de golf, que asegura que los robos nocturnos en las instalaciones deportivas se repiten pese a las numerosas medidas de seguridad. En menos de seis meses se han registrado tres asaltos, según denunciaron ayer varios trabajadores. "Siempre han sido por la noche, y creemos que en dos ocasiones han sido los mismos", dijo uno de los empleados.El penúltimo asalto ocurrió el 25 de junio. Durante la madrugada los ladrones entraron en el campo para robar los altavoces y el equipo de música del quiosco. Los cacos consiguen entrar con facilidad al edificio principal, donde se encuentra la tienda y el restaurante, ya que las vallas están rotas, según comentó otro trabajador.
El campo de golf fue inaugurado el 21 de mayor de 1996. Fue construido en 18 meses sobre 65 hectáreas de propiedad municipal por la empresa Desprosa, que desembolsó 1.500 millones de pesetas después de obtener en concurso público la gestión de este complejo deportivo por 40 años.
El agua de riego se extrae de dos pozos y de tres estanques. Las zonas de paseo se riegan sólo con agua de lluvia, por lo que en verano es un campo ge golf bicolor: amarillo en las zonas secas y verde en el green. Los aficionados disponen de un campo corto de nueve hoyos y de otro de 18. También es posible ejercitar el swing, el latigazo del golpe de salida, tirando bolas en los campos de prácticas.
El campo de golf es un recinto abierto donde no es necesario ser socio para recorrer, golpe a golpe, sus hoyos tras la pelota.
Tan sólo hay que pagar 6.000 pesetas por cada salida, la mitad si se juega sobre nueve hoyos.
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