El PSE acudirá mañana a la concentración promovida por la Diputación de Vizcaya y rechaza la de Guipúzcoa
Los socialistas acudirán mañana a la concentración convocada por la diputación de Vizcaya "en apoyo al proceso de paz". El PSE no participará, sin embargo, y la ha criticado duramente, la otra llamada, efectuada por la diputación guipuzcoana "en favor de los derechos de presos" y contra el "uso político" de éstos. Ambos actos se celebrarán, durante diez minutos, ante las sedes de los dos ejecutivos forales. Los socialistas han querido con su doble respuesta mostrar al nacionalismo gobernante hasta dónde están dispuestos a llegar y por dónde no piensan pasar. El asentimiento a la convocatoria de Bergara se convierte también en un guiño a EH, formación con la que el PSE se ha entrevistado en dos ocasiones oficialmente, en contraste con la política del PP, totalmente cerrada por ahora al encuentro con la formación de Otegi. Sin embargo, EH anunció ayer que no estará en las escalinatas de la Diputación de Vizcaya porque el llamamiento está hecho "con visión de pasado". En una nota dada a conocer ayer, el PSE explica que con su rechazo al acto de Guipúzcoa y la asistencia al de Vizcaya quiere dejar patente que "cuando no se pervierte el papel de las instituciones se pueden lograr zonas de encuentro". La nota acusa a la Diputación presidida por Román Sudupe de ponerse al servicio del Pacto de Lizarra y subraya las diferencias en el seno del nacionalismo que revela el distinto contenido de los dos llamamientos. Por su parte, el PP pidió al diputado general de Vizcaya, Josu Bergara, que envíe su documento a su homólogo Sudupe y llamó al PNV a "salir de la indefinición". Las diferencias, terminológicas y de objetivos declarados por ambas convocatorias, han servido a socialistas y populares para morder en las distintas sensibilidades existentes en el PNV de Guipúzcoa y Vizcaya ante la llamada izquierda abertzale. La ejecutiva del PNV se ha hecho presente en la polémica dejando saber que es el texto de Vizcaya el que tiene el apoyo y el visto bueno del EBB previo a su aprobación por el consejo de diputados. Ello convierte a la declaración vizcaína en la depositaria de la posición oficial del partido y la que será trasladada a otros instituciones para que expresen su adhesión a ella. Este hecho deja en una situación desairada al diputado general de Guipúzcoa, Román Sudupe que, paradójicamente, mantiene una postura de resistencia a la entrada de EH en su gobierno, postulada con entusiasmo por relevantes sectores de la ejecutiva regional. Esa oposición le ha valido críticas en el seno de su partido, a las que ahora se suma, y por el motivo contrario, la censura encubierta que para él supone el apoyo expreso del EBB al texto de Vizcaya. La portavoz de la diputación guipuzcoana anunció que Román Sudupe leerá mañana, al término de la concentración, un comunicado en el que probablemente matice el llamamiento de la semana pasada.
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