Clases entre sacos de cemento y yeso

El retraso en las reformas del Colegio Público San Cristóbal, en Chamberí, impedirá que unos 300 alumnos inicien hoy el curso académico. El colegio comenzó a reformar sus servicios en el mes de febrero, pero los problemas económicos de la constructora, que quebró, hicieron que se paralizaran las obras. Desde hace siete meses, según denuncia en un comunicado la Asamblea de Profesores, Padres y Alumnos, el colegio acumula material de construcción, cascotes con cuatro pisos de altura y sacos de yeso y cemento que han agravado los problemas de asma de algunos niños durante el curso pasado.Tanto el consejo escolar como la dirección del colegio solicitaron a la subdirección territorial de Madrid la solución del problema, pero al regresar se han encontrado con que las reformas no sólo continúan paralizadas, sino que el estado del centro, incluso, ha empeorado.

Ante esta situación, los padres han decidido no llevar a los chavales a la escuela hasta que "la Comunidad no tome cartas en el asunto".

"No es justo que los niños de cinco años vayan a clases en medio de sacos rotos de cemento", declaró Emilia Marcos, representante de los padres.

La asociación de padres ha solicitado a los dirigentes educativos que los alumnos sean escolarizados en otro centro hasta que la situación se regularice. La Comunidad ha dicho que espera que el problema esté solucionado el próximo lunes.