Un rayo atraviesa de punta a punta el mercado de Mataró y sólo hiere levemente a una persona

VIENE DE LA PÁGINA 1 Los vendedores y clientes del mercado municipal de la plaza de Cuba de Mataró se llevaron ayer un susto monumental cuando parte de una enorme piedra de granito de la fachada se desplomó en el interior de local tras recibir el impacto de un rayo, informa Montse Carlas. La piedra, un adorno de la fachada, se partió en tres grandes trozos: uno impactó directamente en una carnicería e hirió levemente a una cliente, otro fragmento cayó en un bar y un tercer trozo afectó a una caseta de venta de cupones de la ONCE. Por designio de la fortuna, el incidente se quedó en un susto. Las personas que en aquel momento, las 8.20 horas, estaban en el interior del mercado no daban crédito a su suerte, especialmente Alfonso y Manolita, en cuya carnicería cayó la piedra, que prácticamente destrozó el puesto y causó daños por importe de 15 millones de pesetas, y a ellos, que estaban en la parada, ni un rasguño. El rayo, tras derribar la enorme piedra ornamental, atravesó el mercado y salió por una de sus puertas provocando un fenomenal estruendo y una cegadora luz que dejó sin aliento a vendedores y clientes. La escasa presencia de público en el mercado a aquella hora influyó seguramente en el hecho de que los daños personales fueran mínimos. El propietario de una pollería situada a pocos metros del lugar donde cayó la piedra aseguró que había sido un milagro que no hubiera heridos de consideración y recordó que después de ver como el techo se venía abajo y una fuerte luz atravesaba el recinto, ni él ni muchos de los presentes podían moverse. "Nos quedamos paralizados, sin poder reaccionar, fue tremendo", señaló el pollero. Las piedras abrieron dos grandes agujeros, de unos tres metros cuadrados, en el techo, que es de uralita. A aquella misma hora, una impenetrable cortina de lluvia -se llegaron a recoger 120 litros por metro cuadrado- sorprendía a los habitantes de Badalona, informa Ester López. Entre las 7.15 y las 8.30 horas la ciudad se vio colapsada por la tromba de agua y granizo que se desplomaba del cielo. La lluvia no causó víctimas, aunque poco faltó. Según informó la Policía Local de Badalona, una pareja tuvo que ser rescatada del interior de un coche cuando el vehículo era arrastrado por la fuerte corriente de una riera. En el barrio de Sistrells, junto a la piscina municipal, un muro enterró un coche; afortunadamente, no había nadie en él. A la sensación generalizada de caos en Badalona contribuyó el fallo de los servicios de radio de la Policía Local. Un rayo cayó en el Turó de Carig, donde se encuentra el edificio de mando del cuerpo, y dañó el centro emisor de radio. A causa de este incidente, las patrullas de la Policía Local que actuaban por la ciudad en aquellos momentos de máxima tensión estuvieron incomunicadas durante una hora. Después, un sistema especial para casos de emergencia permitió que los agentes pudieran volver a trabajar con normalidad y coordinados desde el puesto central de mando. El servicio de metro estuvo suspendido en Badalona durante buena parte de la mañana y más de la mitad de los semáforos de la ciudad quedaron fuera de servicio. Por la tarde todavía había semáforos que no funcionaban. En Montblanc (Conca de Barberà) un rayo dejó sin servicio durante toda la mañana la línea férrea que une Lleida y Barcelona, informa Lali Cambra. A las cinco de la madrugada del martes, un tren mercancías que viajaba hacia Lleida procedente de Barcelona tuvo que detenerse entre Montblanc y L"Espluga de Francolí debido a que la catenaria (el tendido eléctrico del que el tren toma la corriente) había desaparecido. Un rayo dejó en el suelo casi un kilómetro de cable. Los trenes procedentes de Zaragoza tuvieron que ser desviados a Móra la Nova para conectar desde esa población de la Ribera d"Ebre con Tarragona y Barcelona.