Una semana de encierro por la clausura de una guardería para hijos de temporeros

Hoy se cumplen siete días desde que comenzara el encierro que llevan a cabo en el Ayuntamiento de Alcalá del Valle (Cádiz) un total de 17 trabajadores de la guardería para hijos de emigrantes temporeros de la localidad. La protesta está motivada por la decisión de no abrir este año la residencia. El gobierno municipal cerró el centro por la falta de un número suficiente de niños para poner en marcha las instalaciones. UGT, por el contrario, afirma que ya existen casi 40 solicitudes de ingreso en la guardería y que el alcalde, Juan Jiménez (IU), perjudica tanto a los 17 fijos-discontinuos del centro como a algunas familias que han tenido que desistir de trabajar en el extranjero por no encontrar un lugar donde dejar a sus hijos. El déficit de dos millones de pesetas que arrastra la guardería desde el pasado año podría ser otro de los motivos, según los afectados, por el que se ha llegado a la actual situación. Los trabajadores, no obstante, insisten en la utilidad que para un pueblo de 5.500 habitantes tiene una guardería de estas características. Juan Tirado, portavoz de la plantilla, recordó ayer que todavía se está a tiempo de arreglar los perjuicios que esta provocando el cierre de la guardería.