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LA MAESTRANZA

Justicia para Corpas

Antonio Lorca

Francisco Javier Corpas es un novillero sevillano, sin parentesco con los Corpas castellanos (hermanos toreros de las décadas de los cincuenta y sesenta), que dio sus primeros pasos en la Escuela Taurina de esta ciudad y, como tal, toreó con caballos el pasado año en esta plaza. Sorprendió entonces con un toreo elegante y cortó una merecida oreja. En justa recompensa a su buen hacer, el empresario se olvidó de él y no contó con el torero para el abono del presente año. En la última novillada de 1999, y gracias a las presiones de algunos sectores, Corpas ha podido vestirse de luces en Sevilla y ha demostrado al empresario la injusticia de su acción, y a los aficionados, que se debe contar con él porque es un torero cuajado de cualidades y con enormes ganas de triunfo.

Arroyo / Benítez, Contreras, Corpas

Toros: 1º, 5º y 6º de Joaquín Núñez y 2º, 3º y 4º de Torrealta: desiguales de presencia, cornamentas y juego.Espartaco: aviso y aplausos; ovación. Rivera Ordóñez: silencio y vuelta al ruedo. José Tomás: aviso y dos orejas; dos orejas y petición de rabo; salió a hombros por la puerta grande. Plaza Monumental, 12 de septiembre. Tres cuartos de entrada.

Novillos de José Miguel Arroyo y Enrique Martín Arranz, bien presentados, mansos, blandos y descastados Juan Manuel Benítez: estocada trasera (ovación); estocada en los costillares (vuelta)

Juan Contreras: estocada y dos descabellos (ovación); estocada (vuelta). Francisco Javier Corpas: estocada (oreja); cinco pinchazos —aviso— y descabello (ovación).

Plaza de la Maestranza, 12 de septiembre

Un cuarto de entrada.

Volvió a sorprender —en esta ocasión, a los turistas, aplastante mayoría en La Maestranza— con un toreo natural, de buen corte, muy personal y vistoso, en una faena corta pero muy detallista a su primero, un toro, como todos, distraído y rajado en el tercio final. Ratificó la impresión en el último, un manso al que toreó con pases largos y profundos.

Dicen que Juan Manuel Benítez está próximo a tomar la alternativa y que el lujo de la misma dependía del éxito de esta tarde. Pues la verdad es que dio una de cal y otra de arena. Toreó a su primero con la muleta retrasada, mal colocado, y los pases salían enganchados, sin gracia alguna. Salió el cuarto, más chico pero más noble, y el novillero resultó transformado. No fue entonces un torero cómodo, pero sí muy forzado en la figura. Benítez tensiona su cuerpo, habla al toro con voz decididamente desgarrada y quiere ser flamenco cuando es torero. Su faena alcanzó momentos emocionantes en dos tandas de naturales agitanados —cortos en su recorrido y con el codo pegado a la cadera—, pero muy sentidos y jaleados y, especialmente, en un pase de pecho larguísimo y ejecutado a cámara lenta.

Contreras tuvo peor suerte con su lote. Es valiente, con sentido del buen toreo, pero sólo pudo dejar constancia de su pundonor ante dos mansos difíciles que no le permitieron lucimiento alguno.

Morante, lesionado

Morante de la Puebla se encuentra lesionado como consecuencia de la cogida que tuvo el pasado viernes en San Martín de Valdeiglesias y ha cortado la temporada, informa Efe.

Atendido en una clínica de Madrid y después en el hospital de la Cruz Roja de Sevilla, se le ha diagnosticado fractura de una vértebra lumbar, que le obligará a permaner inactivo dos meses y medio.

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Sobre la firma

Antonio Lorca
Es colaborador taurino de EL PAÍS desde 1992. Nació en Sevilla y estudió Ciencias de la Información en Madrid. Ha trabajado en 'El Correo de Andalucía' y en la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Ha publicado dos libros sobre los diestros Pepe Luis Vargas y Pepe Luis Vázquez.

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