Aberchan propone para Melilla un Gobierno de concentración "poniendo el contador a cero"

El presidente de Melilla, Mustafa Aberchan, avanzó ayer el contenido de su anunciada propuesta "sorpresa" en busca de la gobernabilidad de la ciudad autónoma. Ofrece un Gobierno de concentración -en el que participen todas las fuerzas menos el GIL- "poniendo el contador a cero" para "empezar todos desde el mismo plano". Aberchan (5 escaños), que gobierna con el PIM (3) en una Asamblea de 25 diputados, afirma que su intención es formar "un Ejecutivo de 18" y que esta iniciativa está avalada por el dirigente del PSOE Ramón Jáuregui. La principal incógnita es saber en qué consiste la "puesta a cero" que propone Aberchan, que podría incluir una presidencia rotatoria.

Para reforzar su propuesta, Mustafa Aberchan, líder de CPM, dio a conocer la reunión que celebró el pasado fin de semana en Madrid con Ramón Jáuregui, responsable de política autonómica del PSOE. "Le hemos propuesto al PSOE nuestro proyecto de Gobierno, en el que contaríamos con el PP, PSOE, PIM y UPM. Se trata de una puesta a cero de los contadores para empezar todos desde el mismo plano, para formar ya de una vez un Gobierno estable de 18". Los socialistas, según Aberchan, "han mostrado su satisfacción por esta propuesta y la aceptarán cuando el resto de partidos políticos muestren su conformidad. Por tanto, ya contamos en principio con el beneplácito del PSOE [2 escaños]; ahora esperamos la respuesta de UPM [3] y del PP [5]. El presidente no quiso ser más preciso, pero sí aclaró que ésta era "la sorpresa de la que venía hablando en estos días". Y advirtió: "Si el PP y UPM se niegan, tendrán muy difícil dar una justificación válida al resto de ciudadanos y sobre todo a sus votantes".

Juan José Imbroda, presidente de Unión del Pueblo Melillense, sospecha que la oferta consistiría en repartir la presidencia en mandatos de dos años y la rechaza porque no está de acuerdo en que "esa puesta a cero de los contadores sea marcando Aberchan los números".

"Aberchan juega con el Gobierno de la ciudad y con la presidencia como si fuera un cortijo privado. No amplía qué significa su concepto de suma generosidad, que no es, ni más ni menos, que se confíe en su amistad para aceptar dos años de presidencia para CPM y dos para UPM, siempre él primero. Dentro de dos años se presupone que él dimitiría y que me votaría a mí. Pero esto no es su cortijo".

En este compás de espera, los consejos de administración de las sociedades públicas Envismesa y Promesa, convocados para ayer, en los que iban a ser nombrados los nuevos presidentes y vicepresidentes, han quedado suspendidos a petición de los socialistas "para intentar llegar a un acuerdo con el PP y UPM para evitar que el GIL pueda hacerse de nuevo con alguna cota de poder". La pasada semana, el GIL obtuvo la vicepresidencia de la televisión local gracias a la abstención del PP.